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diana.fuentes@eluniversal.com.mx
Taxistas autorizados del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) responsabilizaron a los gobiernos local y federal de llevar a cabo operativos esporádicos para frenar la competencia desleal con empresas dueñas de aplicaciones.
Alertaron que aún cuando Uber y Cabify han bajado la calidad de su servicio, existe el riesgo de que estas redes desplacen a los taxistas concesionados por tener una tarifa menor a la del taxi autorizado, pero inseguro para los usuarios.
Pidieron al gobierno capitalino que actúe en contra de la actuación clandestina e ilegal, porque mientras la tarifa de los concesionarios es regulada y establecida, las de Uber se determinan de manera unilateral.
Carlos Tepale, presidente del Comité Directivo de Transportación Terrestre Nueva Imagen, aseguró que la presencia de los taxis por aplicaciones está dejando en la indefensión a casi 20 mil familias que dependen de esta actividad; tan sólo dentro del AICM, hay siete empresas que prestan el servicio y cuentan con mil 800 unidades.
Aclaró que no están en contra de la competencia siempre y cuando sea legal y bajo los mismos lineamientos.
Riesgos. Miguel Ángel Téllez, asesor de los taxistas, alertó que si Uber y Cabify siguen sin ser regulados se corre el riesgo de que se rijan sin requisito alguno, en perjuicio de permisionarios y usuarios.
Puso como ejemplo que para poder estar en la terminal aérea los autorizados tienen que pasar una regulación estricta, revisiones psicológicas y médicas y cursos de capacitación; mientras los competidores no, ni si quiera a la aprobación de una licencia, lo que deja desprotegidos a los pasajeros.