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david.fuentes@eluniversal.com.mx
Una pandilla, supuestamente vinculada con la Unión Tepito, es la encargada de robar, extorsionar e intimidar a vecinos de la colonia Obrera, según revelaron los propios afectados, quienes aseguran que denunciaron la situación a las autoridades; sin embargo, la inseguridad sigue.
El grupo está compuesto por jóvenes de entre 16 y 25 años. Al líder lo identifican como sobrino del Chori, uno de los cabecillas del cártel. Éste presuntamente ordena el robo de autopartes que después vende en la Doctores, además de la distribución de drogas al menudeo. Se mueven en motocicletas y motonetas.
En el sector Asturias —como tiene catalogado la SSPCDMX a esta zona— las quejas que reciben mensualmente aumentaron 10%, según las estadísticas de la delegación Cuauhtémoc y de la propia corporación policiaca, al pasar de 183 a 202 cada 30 días, es decir, 19 denuncias en promedio semanalmente.
A mediados del mes pasado, cuatro de sus integrantes fueron baleados en una taquería como represalia por robarle el bolso y un teléfono celular a la novia de uno de los integrantes de la Unión; los vecinos temen que esto desate un enfrentamiento, pues los jóvenes “no tienen control”.
Las denuncias que ha recopilado la SSP detallan que los pandilleros tienen su base en una vecindad de la calle Manuel Gutiérrez Nájera que en 2015 fue revisada en un operativo de la procuraduría capitalina.
“Si te descuidas en menos de un minuto desvalijan un carro, los amigos de mis hijos no vienen porque los roban, no podemos salir ni por tacos porque ya nos están esperando. Se acercan y te dicen que si no les damos para las caguamas, de buena manera te roban. Ya ve lo que le hicieron a la patrulla el domingo; el mes pasado corrieron a otros policías, de verdad estos chavos no tienen control”, comentó Carmela, vecina que ha sido asaltada tres veces en este año.
Negocio redondo. Los trabajos de inteligencia de la procuraduría ubican por lo menos dos locales de autopartes, una casa de empeño y un local en la Plaza de la Computación donde se venden los objetos robados, mientras que en el Mercado Hidalgo se ofertan los sábados tenis, pantalones de mezclilla, chamarras y otras ropas “de segunda”, así como electrodomésticos que hurtan de colonias vecinas.
Las autoridades estiman que este negocio les deja a los delincuentes ganancias superiores a los 20 mil pesos por semana, recursos con los cuales aparentemente sobornan a policías de la SSP, por lo que también hay una investigación; aunado a esto se rastrea la procedencia de la droga que distribuyen
Autoridades temen que con el desmantelamiento del presunto cártel de Tepito, el vacío pueda ser ocupado por el sobrino del Chori.
