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Magistrados de la Primera Sala Penal confirmaron el auto de formal prisión contra dos mujeres acusadas de trata de personas en agravio de tres víctimas, quienes eran obligadas a ofrecer servicios sexuales en un spa, ubicado en la delegación Cuauhtémoc. Una de las acusadas aseguraba ser novia de un político para causas temor.
Según las pruebas presentadas por la Procuraduría General de Justicia capitalina, las inculpadas estaban a cargo de un negocio localizado en la calle Copenhague, en la colonia Juárez, en el que se le ofrecía a los clientes que recibían masajes la posibilidad de tener relaciones sexuales o sexo oral con las empleadas.
Según las investigaciones, una de las imputadas reclutaba a las jóvenes para trabajar en el establecimiento, les pedía sus datos y su credencial de elector, para después amenazarlas, diciendo que si se negaban a dicha labor, las delataría con su familia o atentaría contra su vida, pues les hacía creer que era novia de un político y tenía gente que podía hacer "lo que ella les pidiera".
Según un comunicado de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, en el spa las chicas eran llamadas para que los hombres las observaran y eligieran a una; acto seguido, pactaban con las implicadas el servicio, cuyo precio variaba dependiendo de los requerimientos de los clientes.
Una vez realizado el acuerdo, el sexoservicio se realizaba en cabinas; las empleadas sólo recibían una parte de las ganancias y el resto lo entregaban a sus victimarias, y si se tardaban más de 30 minutos, no recibían nada.
Con preservativos usados, las tratantes llevaban a cabo un conteo de los trabajos realizados por cada mujer.
Luego de la denuncia de cinco víctimas, la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Trata de Personas realizó un operativo en abril de 2016, que derivó en la detención de las imputadas.
La inocencia de las mujeres todavía se presume hasta que, en su caso, la autoridad jurisdiccional resuelva lo contrario.
jlcg
