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Como patadas de ahogado consideró el líder del PRD capitalino, Raúl Flores, la denuncia del delegado en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal, sobre un presunto desvío de recursos por 687 millones de pesos a cargo de tres dependencias locales y las seis delegaciones que gobierna el PRD, ante el vencimiento del término legal para que el ex director jurídico y de Gobierno, Pedro Pablo de Antuñano, informara la procedencia ilícita de 600 mil pesos.
Después de que Monreal Ávila se reuniera con diputados de Morena en la Asamblea Legislativa por su comparecencia ante la Comisión de Administración Pública Local, Flores negó se trate de una persecución política hacia el político zacatecano o incluso hacia el partido político que dirige Andrés Manuel López Obrador.
"Se está victimizando y haciendo lo mejor que sabe hacer, tejiendo cortinas de humo como lo hacía en Zacatecas", declaró el perredista.
Pidió a Monreal asuma la responsabilidad ante los hechos de corrupción de sus colaboradores más cercanos y deje de afirmar que se trata de un complot en su contra, cuando ni siquiera ha sabido explicar por qué su ex director Jurídico y de Gobierno, traía consigo 600 mil pesos en una caja de cartón el 15 de septiembre.
"El que (Antuñano) haya renunciado a su cargo en la Cuauhtémoc no lo exime de responsabilidad y ahora tiene que cumplir porque es un proceso para ver quién le entregó los recursos", precisó Flores García.
En entrevista, el también vicecoordinador de la bancada perredista en el órgano legislativo local dijo que aunque Monreal aclaró que De Antuñano ni siquiera es militante de Morena sí forma parte de un gobierno obradorista, cuyas administraciones han tenido una serie de escándalos por dinero en efectivo, por cuestiones de Uso de Suelo y también por operación de giros mercantiles.
“Quien quiere politizar el caso de Pedro Pablo de Antuñano es el propio Monreal quien pretende mezclar el tema de elecciones, con un asunto judicial y de legalidad”, advirtió el perredista.
