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“Ya me siento muy cansado,
ya me quiero jubilar”, dijo el caricaturista Eduardo del Río García, "Rius" con un acento aciago y después vino su recomendación: aprovéchame porque ya estoy cansado.
Esa plática la recuerda muy bien Jesús Sedano, director del Auditorio Ilhuicalli de Tepoztlán, porque dice que el maestro pronunció la palabra jubilar con sentido funesto.
“Cuídese mucho maestro”, le decían a "Rius" y contestaba: ¿Me cuido?, ¿De quién o de qué? . Así era el maestro, quien vivía con intensidad cada día, cómo si fuera el último, siempre dijo eso, recuerda el también promotor cultural.
El caricaturista caminó mucho por este pueblo mágico de Morelos. Recorrió campos, calles y conoció de la combatividad de hombres y mujeres en temas sociales.
"Al maestro lo conocí en los 90, cuando caminaba por Tepoztlán cautivado por el misticismo del pueblo", dice Sedano.
Pero así como se deleitaba con los paisajes que ofrece este pueblo, también manifestaba su disgusto por las fiestas patronales. “Al fin ateo no gustaba del brinco del chileno porque decía que era siempre lo mismo. En ocasiones no era muy bien visto porque aquí se adora a la Virgen de Guadalupe, y pues él era ateo, no creía en eso”, relata Sedano.
"Rius" gustaba de relacionarse con la gente de Tepoztlán y en ocasiones aceptaba invitaciones a comer mole y aunque era vegetariano aceptaba lo que la gente le obsequiaba.
El director del auditorio cuenta que el último encuentro que tuvo con "Rius" fue hace como año y medio , luego de que el maestro regresó de Chiapas tras ver a su hija.
Dice que cuando era reconocido en las calles y le pedían fotos, Eduardo del Río hacia la señal de cuernos porque no le gustaba posar para las fotos.