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Tres recién nacidos fallecieron y uno más se encuentra delicado, luego de que contrajeron una grave infección en los cuneros del hospital de Guadalupe y Calvo, confirmó la Secretaría de Salud del estado. Los cuatro menores son de origen tarahumara.
“Adquirieron una infección nosocomial, situación que dejó sin vida a tres de ellos, en tanto que la cuarta afectada tuvo que ser trasladada para su atención al Hospital General de la Ciudad de Chihuahua”, detalló la dependencia en un comunicado.
El hospital se ubica en la cabecera del municipio del mismo nombre, en una región boscosa, en los límites de Durango y Sinaloa.
“Los menores con nacimiento prematuro, entre las 32 y 35 semanas de gestación, llevaban un control por un equipo profesional de pediatras, quienes al realizar pruebas de rutina identificaron la alteración en la salud de uno de los pacientes, quien fue tratado de inmediato con medicamento; no obstante, luego de unas horas salud empeoró y falleció de un infarto al ser atendido en terapia intensiva”.
Se detalló que tras aplicar exámenes de sangre, se determinó que el menor padecía una infección que presuntamente fue adquirida en el hospital, por lo que se mandó a laboratorio el catéter umbilical para constatar el tipo de infección que había adquirido.
A su hermano gemelo se le diagnosticó “entercolitis necrotizante”, enfermedad que afecta a los recién nacidos; dos horas después de que murió el primero de ellos, el médico determinó que el menor presentaba temperatura corporal muy baja, no tenía pulso ni reflejos y falleció con diagnóstico de falla orgánica múltiple, prematurez y sepsis neonatal tardía.
Después se determinó que otros dos recién nacidos también presentaban un cuadro infeccioso. Uno de ellos falleció.
