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estados@eluniversal.com.mx
Sacerdotes católicos de 11 parroquias de las regiones de Apatzingán, Lázaro Cárdenas y Tacámbaro han sido amenazados por integrantes del grupo delictivo de Los Viagras, quienes les exigen respaldar ante la población sus actos delictivos, comentó el padre Gregorio López Gerónimo.
Explicó que los integrantes del grupo criminal pretenden que los clérigos convoquen al levantamiento en armas de los pueblos que se disputan con los reductos de Los Caballeros Templarios. Un video en poder de EL UNIVERSAL, grabado por un habitante de la región de Tierra Caliente, revela las amenazas que lanzan contra un sacerdote. En la grabación de 36 segundos se escucha una voz de quien fue identificado como Juan José Faburrieta, jefe de plaza de Los Viagras en Cupuán del Río, La Huacana, lanzando un ultimátum al párroco de la comunidad El Capiro.
“Díganle a ese curota que no se oponga, sinceramente, no queremos líos, porque esa actitud que tuvo en Capiro, la verdad es reprobable, porque él sabe. Sí, nos apoyó el pueblo, pero él fue y cerró todo.
“Queremos tener respeto y no queremos hacer las cosas a la fuerza, que no se oponga, porque es por su propio bien, díganle, porque a los curitas también los han matado”, dice el presunto capo.
El video fue grabado en una reunión a la que convocó Faburrieta en la comunidad de Cupuán del Río, municipio de La Huacana, ubicada a 15 kilómetros de Gámbara.
El autor del video —quien pidió el anonimato— asegura que Los Viagras repartieron armas entre los habitantes en la concentración, a quienes les instruyeron que las usaran para confrontar al grupo templario de Ignacio Rentería Andrade, El Cenizo.
Los curas se negaron a hablar del tema por miedo a los integrantes del grupo delictivo y autorizaron que a nombre suyo hablara el padre Gregorio López Jerónimo, de la Diócesis de Apatzingán.
El Padre Goyo, quien a principios de 2014 ofició misa portando un chaleco antibalas, apuntó que Los Viagras son parte de la escuela criminal que dejaron La Familia Michoacana y posteriormente Los Templarios.
“Me han llamado muchas veces —los curas— para decirme: ‘Están extorsionándome’, pero les digo: ‘No sé, salte de momento, muévete, pero no podemos defendernos’”, reveló.
Como resultado de estas amenazas, El Padre Goyo afirmó que dos sacerdotes tuvieron que abandonar sus parroquias y fueron cambiados. También recordó que el pasado 11 de abril, gente armada baleó la iglesia de la comunidad de Las Caramicuas, municipio de Tumbiscatío.
El 2013, El Padre Goyo brindó su apoyo a los grupos de autodefensa en Tierra Caliente, incluso acudió a instancias internacionales para exigir la liberación del ex líder José Manuel Mireles, preso desde junio de 2014.
Antecedentes. Fuentes de inteligencia señalan que los enfrentamientos de los últimos días en Michoacán son el resultado del intento de integrantes de Los Templarios por recuperar las plazas de las que se apoderaron Los Viagras.
Señalan que los Sierra Santana han armado a las poblaciones para sumarlos a su grupo con la “máscara de autodefensas”.
Esto, explicaron, originó que El Cenizo intentara recuperar desde Las Cruces, municipio de Tumbiscatío, donde hubo un muerto, hasta Gámbara, donde también se lidiaron a tiros, por un lapso de 35 minutos, donde dejaron daños materiales en viviendas y vehículos que se encontraban a su paso.