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Internos del penal de Apodaca, Nuevo León, participaron hoy en la ceremonia del Lavatorio de Pies, como parte de las actividades de la Iglesia católica correspondientes al Jueves Santo.
Durante la ceremonia, encabezada por el arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López, se exhortó a los internos a vivir en paz y crear un mejor entorno en el lugar en que se encuentran.
En su visita al centro de internamiento, el jerarca religioso subrayó la importancia de mantener estas actividades al interior de los reclusorios de la entidad, al considerar que son una oportunidad de reflexión para todas las personas.
"Es una palabra para la gente que no está aquí, de reconocer que aunque haya dificultades en los Ceresos, es nuestro deber apoyar, es nuestro deber orar y también ponernos al servicio", destacó.
Consideró que “la sociedad y nosotros (Iglesia) somos responsables de que esto camine mejor, no basta quejarse, no basta criticar, es necesario que cada quien haga lo que está de su parte”.
Durante la homilía, el prelado invitó a los internos a la concordia, al respeto entre ellos, a disminuir la agresión entre ellos mismos para que el tiempo que transcurren aquí, sea lo menos doloroso”.
afcl
