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El conflicto postelectoral en Oxchuc es resultado de la descomposición social, “que fue diseminada” por autoridades pasadas, quienes sembraron el odio y la discordia entre los tzeltales “para mantenerse en el poder”, declaró el alcalde sustituto Óscar Gómez López.
Además, pidió castigo para los agresores del ex alcalde de ese municipio, Juan Encinos Gómez (1987-1988), quien el jueves pasado fue vejado por un grupo de manifestantes en las calles de San Cristóbal de las Casas.
Gómez López cuestionó a los órganos electorales que permitieron la participación de María Gloria Sánchez Gómez en el proceso comicial, por ser la esposa de Norberto Sántiz López, detenido el sábado por un presunto quebranto de más de 13 millones de pesos cuando fue alcalde (2012-2015).
“En esa ocasión, María Gloria argumentó que ya no mantenía una relación conyugal con Norberto, pero mintió. Ahora que él fue detenido, aparece con un pronunciamiento literal defendiendo a su esposo”, indicó.
Fue entonces que como candidata del PVEM, María Gloria violó el artículo 68 de la Constitución de Chiapas, en el que se pide que para ser candidato a alcalde no se debe ser cónyuge del edil o síndico en funciones, explicó.
María Gloria Sánchez Gómez pidió al obispo Felipe Arizmendi Esquivel su intervención para buscar una solución al problema de Oxchuc.
El prelado dijo que le preocupa “enormemente” el caso de Oxchuc y Chenalhó, donde las alcaldesas María Gloria Sánchez y Rosa Pérez, quienes ganaron limpiamente el proceso electoral del 19 de julio de 2015, fueron obligadas a renunciar a su cargo. A pesar de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ordenó su restitución, no ha sido posible, por los conflictos que hay en las comunidades.
Señaló que en todo este tiempo “no faltó alguien que dijera que no tomaron posesión por ser mujeres, pero esto es totalmente falso. Siempre las hemos apoyado por ser mujeres las dos, por ser muy preparadas [académicamente] y muy capaces”. Pero los conflictos que existen en las comunidades ha evitado que tomen posesión de su cargo.
Por lo pronto, el obispo pidió que tanto en Oxchuc como en Chenalhó, se deben buscar caminos para que tomen posesión de su cargo con el consenso de las comunidades. Sin embargo, explicó que si las alcaldesas quieren el bien de su pueblo, vean lo que más conviene: “su presencia o su renuncia”.
