El Movimiento “Salvemos Manglar Tajamar” arrancó al mediodía de hoy un envío masivo de mensajes por Twitter, o "tweetstorm", con la petición #TajamarEsDeTodos, dirigida al gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, para que pedir la protección de “Malecón Tajamar” en Cancún y que sea intermediario ante el gobierno federal para que el polígono quede como una reserva para disfrute de la comunidad y el turismo.
La “tormenta de twitts” o petición masiva inició al mediodía y concluye a las 14 horas de hoy, con el hashtag #TajamarEsDeTodos, y debe incluir la cuenta de @CarlosJoaquin, quien rindió protesta el domingo pasado como gobernador constitucional de Quintana Roo, indicó Antonella Vázquez.
La abogada, quien se unió al activismo a favor de la conservación de “Malecón Tajamar”, desde julio del año pasado, cuando la primera devastación de algunos predios, explicó que la petición dirigida a Joaquín González, busca que sea intermediario de la comunidad ante el gobierno federal, para que se frene el desarrollo del polígono de 74.8 hectáreas y se decrete área protegida.
La ciudadana, que participa en el movimiento a partir de que sus hijas pequeñas le pidieron hacer algo para evitar la destrucción de la fauna silvestre y de los ecosistemas del sitio, asumió que el tema es de competencia federal, debido a que las autorizaciones fueron emitidas –irregularmente- por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), el proyecto ha sido impulsado y los terrenos, vendidos, por el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
“Sabemos que es un tema en donde el gobierno estatal no tiene competencia, pero sí la tuvo cuando el anterior gobernador (Roberto Borge) mandó a la policía estatal el día en que las máquinas entraron a devastar Tajamar, entonces creemos que en esta ocasión el nuevo gobernador puede intervenir, pero en positivo, es decir, a favor de la conservación de Tajamar y no para entorpecer la acción ciudadana”, dijo.
Durante la campaña electoral, Carlos Joaquín moderó su postura en cuanto al tema, al que se refirió de forma general.
En algunas entrevistas, se dijo a favor de la conservación del sitio; siempre se pronunció a favor de la legalidad; declaró que habría que revisar el tema; aclaró que no era competencia del estado y durante el debate con los otros candidatos a la gubernatura, eludió en tres ocasiones, fijar una postura clara, en respuesta a la petición que le hizo José Luis Pech, entonces candidato del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), retomada por Mauricio Góngora, quien era abanderado del PRI-PVEM.
La madrugada del 16 de enero pasado, maquinaria contratada por Fonatur, entró a desmontar y rellenas manglares, selva y sabana en el polígono de Tajamar, con autorización de la Semarnat y de la Dirección de Ecología del gobierno municipal de Cancún, a cargo de Paul Carrillo, incluidos los predios propiedad del municipio que le fueron donados y que son públicos, no privados.
Lo ocurrido encendió protestas por parte de la comunidad, que condenó los hechos y los difundió a través de redes sociales, lo cual causó una ola de indignación en México y el mundo. Las acciones incluyeron la interposición de recursos jurídicos, ante jueces federales, juicios cuya resolución está pendiente.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) se presentó dos semanas después de los hechos, al sitio, a fin de evaluar los daños, determinando que no hubo devastación ni ecocidio. Inició un procedimiento administrativo en contra del Fonatur, que meses después cerró, exculpando al Fondo de haber violentado los términos y condicionantes de la autorización de impacto ambiental que le fue autorizada por Semarnat, el 28 de julio del 2005.
El Movimiento “Salvemos Manglar Tajamar” criticó la determinación de la Profepa, acusó a la autoridad de intentar “encubrir” al Fonatur, por las violaciones al resolutivo de impacto ambiental e interpuso un recurso de revisión sobre su dictamen.
cfe