Más de mil 500 unidades del Sindicato de Taxistas, Andrés Quintana Roo, se manifestaron hoy en Cancún en contra de la operación de la empresa UBER que, a casi dos semanas de entrar en la ciudad, reporta una cifra histórica de aceptación por parte de usuarios, con más de mil 800 personas que abrieron la aplicación para contratar el servicio y 700 socios operadores inscritos en su padrón.

Para contrarrestar la operación de la empresa, a nivel regional se creó un frente de transportistas que agrupa a operadores de Yucatán, Campeche, Veracruz, Chiapas y Mérida, que convocaron a una caravana vehicular para este martes, que pretendía sumar 50 mil unidades.

La protesta sólo se desarrolló en tres ciudades de los cinco estados convocados y concentró a más de mil 500 unidades en Cancún, que salieron de la avenida Huayacán, en la ciudad, con dirección al hotel Moon Palace, a vuelta de rueda, lo que complicó el tránsito por la carretera federal que conduce hacia la Riviera Maya.

Los vehículos retornaron con destino al monumento del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), en la Tercera Etapa de la zona turística de Cancún.

Los operadores se quejaron de la competencia “desleal” que representa UBER y de que brindan un servicio fuera de la ley, al carecer de concesión.

Pese a protestas y detenciones, UBER se mantiene

Ante el amague de sindicatos locales de taxistas tradicionales, UBER ofreció hoy viajes gratuitos, hasta por 50 pesos, entre las 8 y las 20 horas, usando el código ElijoUberCancún.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Luis de Uriarte, director de comunicación de UBER en México, indicó que a dos semanas de haber entrado a brindar sus servicios a Cancún, la respuesta de las y los usuarios ha sido “contundente”, con más de mil 800 personas que han hecho uso de la aplicación y más 700 fuentes de trabajo creadas.

A nivel regional, -Mérida, Villahermosa y Campeche- se han creado un promedio de 9 mil autoempleos, con más de 370 mil personas que han bajado la aplicación.

De Uriarte consideró que los operativos montados por la Secretaría de Infraestructura y Transporte (Sintra), para detener unidades de socios operadores de UBER, son ilegales y que la Ley de Tránsito, Transporte y Explotación en Vías Carreteras de la entidad, atenta contra el derecho al trabajo y no les aplica, pues el requisito de contar con una concesión, es para el transporte público, no para el privado.

Defendió la necesidad de diversificar la oferta de servicios de movilidad y la voz ciudadana que ha recibido positivamente la opción que representan, no solo para los locales, sino para los turistas que recurren a la aplicación.

Manifestó que cuentan con el aval de legisladores y del propio gobernador, Carlos Joaquín, quienes se han pronunciado a favor de la libre competencia y la diversificación de ofertas y servicios.

En efecto, diputados locales y el mandatario estatal han respaldado mejores opciones de servicio de transporte, pero siempre dentro del marco de ley.

En ese sentido, fue cuestionado acerca de por qué decidieron entrar antes de que la Ley vigente, que les impide operar sin concesión, fuese modificada, a lo que respondió que dicha ley –en su opinión- tiene “huecos”, que es obsoleta, que no les aplica y que existe un debate en torno a si realmente les prohíbe o no brindar el servicio.

Al señalarle que el nuevo gobierno, a través de Sintra, sostiene que están fuera de la ley, al no contar con una concesión, insistió en que la postura de la empresa es que gozan del respaldo de los usuarios y que la ley debe adecuarse a las nuevas necesidades.

El servicio de UBER es ilegal: Sintra

Por separado, el nuevo secretario de Sintra, Jorge Portilla Manica, informó a este diario que en dos semanas de la entrada en operación de UBER, se han detenido más de 100 unidades que brindan el servicio, por violentar los artículos 31 BIS y 32 de la Ley de Tránsito, Transporte y Explotación de Vías carreteras del estado.

“La realidad es que esta empresa está brindando un servicio que según las leyes en Quintana Roo, no puede dar porque no tiene concesión. Estamos ya reuniéndonos con taxistas; mañana tengo una reunión con los 17 directivos y también con los directivos de los socios operadores, los ‘martillos’”, expresó.

La postura del gobierno es que los taxistas brinden un mejor servicio, “que se pongan las pilas”, que tengan un mejor trato, mejores unidades y que cobren lo justo.

“Por otro lado, si UBER nos pide ver cuál es su plan, cómo estaría regularizado, si demuestra que paga sus impuestos y bajo qué esquemas opera, pues estamos en la mejor disposición de respetar.

“Nosotros no nos vamos a pelear con nadie, pero sí vamos a aplicar la ley, lo que significa que continuarán los operativos para retener vehículos en estricto apego a derecho y sin transgredir los Derechos Humanos”, manifestó.

Al mencionarle que la empresa argumenta que se les pretende aplicar una ley de transporte público, cuando brindan un servicio privado, respondió:

“Bueno, pero están cobrando en ese servicio privado, entonces es un negocio y todo negocio debe regirse a las normas y reglas de donde da el servicio, que en este caso es Quintana Roo. Si a ellos les asiste el Derecho, que se amparen. Si muestran un documento emitido por un juez federal, lo respetaremos”, señaló.


Al momento la empresa no ha exhibido a la autoridad ningún amparo. Luis Uriarte cuestionó que por qué tendrían que hacerlo.


“Aquí no se trata de estar a favor o en contra de la empresa, sino de la aplicación de la Ley y si la ley dice una cosa, tendremos que sujetarnos a ella hasta que sea modificada, en todo caso”, advirtió Portilla Manica.

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