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Aguascalientes.— Martín Orozco Sandoval, por segunda ocasión candidato del PAN a la gubernatura, dice que “de las derrotas se aprende”, y que en esta campaña dejó a un lado la estrategia de la defensa, optó por la propuesta a los electores, y sostiene que hoy, antes de la veda electoral, tiene casi siete puntos arriba del segundo lugar.
Afirma que está preparado para reaccionar ante cualquier ataque bajo, antes del domingo, y contra eventuales actos ilegales en la jornada electoral, en lo que espera sea un triunfo contundente que fructifique 12 años de trabajo por alcanzar la gubernatura del estado.
Orozco Sandoval comenta que su equipo también está alerta respecto de “acontecimientos en materia de seguridad”, como ocurrió hace seis años, con versiones de escándalo de nota roja, de supuestas balaceras, apariciones de cuerpos, o del estallido de una bomba que se activó media hora después de que el PRI emitió un comunicado en el que lo acusaba de los hechos, en un inmueble en el que se resguardaban paquetes electorales.
En entrevista, dice que llega al final de la contienda con acuerdos pactados con sectores productivos. Con la Iglesia católica lo identifican, dice, objetivos comunes, “más mi estilo de vida y mi proyecto de gobierno, orientado muy en defensa de la vida y de la familia”. Estos valores “los tengo de siempre, no sólo son asumidos en la campaña”.
Considera que es válida la postura del obispo de Aguascalientes, José María de la Torre, sobre las elecciones del próximo domingo, quien se manifiesta en favor de la familia formada por un hombre y una mujer libres, con un rechazo implícito a la iniciativa de reformas en materia de matrimonio igualitario de Enrique Peña Nieto.
Niega que esta reacción de la jerarquía católica, a unos días de las votaciones, vaya a tener impacto que lo beneficie, aunque “pueden caer” votos a su favor como efecto del mensaje del prelado en sus feligreses. Comenta que él es “muy conocido en la parte social de los feligreses y sacerdotes”, y son sabidos sus objetivos afines a la familia.
Sus contactos con los grandes empresarios de la entidad le permitieron transmitir la certeza de que en lo personal encontrarán en él a un gobernante que de ninguna manera va a practicar los negocios. Además, dijo que entablará una relación sin “moches” con los constructores, a quienes trató cuando fue alcalde.
