Cancún.— El movimiento Salvemos Manglar Tajamar (SMT) evidenció ayer nuevas irregularidades en el caso de los terrenos de Malecón Tajamar.
En conferencia de prensa, la activista Aracely Domínguez, acompañada de las abogadas Isabel González Glennie y Antonella Vázquez, dieron a conocer el resultado de las investigaciones hechas para determinar quiénes son los propietarios de los lotes dentro del polígono de 78.4 hectáreas, el estatus legal de los terrenos y las afectaciones reales a los inversionistas, de frenarse las obras.
Como resultado, el grupo SMT descubrió que, de acuerdo con el Registro Público de la Propiedad y el Comercio (RPPyC), los terrenos que el Fonatur donó en 2007 al gobierno municipal de Cancún, para hacer un parque urbano e infraestructura cultural, se fusionaron en uno solo y fueron embargados por 600 millones de pesos, a nombre de “Grupo Carretero”, lo que supone que se dieron en garantía para el pago de alguna deuda, no esclarecida ni informada a la ciudadanía.
“Hay que recordar que los terrenos públicos son inembargables”, acotó González Glennie.
Que si bien ese embargo fue cancelado en febrero de 2013, durante el último tramo de la administración del entonces alcalde, Julián Ricalde, en octubre de 2015 —ya con el actual gobierno encabezado por el alcalde Paul Carrillo— existe un traslado de dominio que indica que las 5.4 hectáreas fueron enajenadas o vendidas, aunque la posible venta no figure aún en el Registro Público.
Antonella Vázquez subrayó que nunca se informó a la ciudadanía sobre los motivos para embargar los predios públicos, ni cuándo se dio el embargo ni el cambio de dominio de los predios, de público a privado; tampoco con qué otros predios o de dónde salió el dinero para pagar o acreditar los 600 millones de pesos que debía la comuna. Menos se conoce a quién se enajenaron o vendieron o si se han rentado.
Para Vázquez es claro que los predios fusionados en uno sólo, “ya fueron vendidos”.
Los antecedentes de estos terrenos, ubicados como 1, 2 y 10, de la Manzana 9, Supermanzana 6, fueron publicados por EL UNIVERSAL, el 7 de febrero pasado, cuando se citó que entre 2009 y 2010 la administración del entonces alcalde, Gregorio Sánchez —quien hoy se registró como candidato del Partido Encuentro Social (PES) para repetir como presidente municipal de Cancún— intentó enajenar el trío de lotes, pretextando que había que pagar la deuda municipal de dos gobiernos previos al suyo: el de Francisco Alor y el de Juan Ignacio García Zalvidea.
En sesión de Cabildo se les modificó el dominio de público a privado; se instruyó al inicio del procedimiento para cambiarles el uso de suelo de parque urbano a comercial y se aprobó la enajenación de dichos inmuebles. Hubo una subasta para intentar venderlos en 244 millones 391 mil 908 pesos y un Tribunal declaró ilícita la enajenación, gracias al amparo promovido por la asociación “Ombligo Verde”.
Sin embargo, el cambio de dominio y el tema del cambio de uso de suelo no se revirtieron y el tema quedó guardado en el archivo hasta que el 16 y 17 de enero pasados, el Fonatur desmontó 22 hectáreas en Malecón Tajamar, afectando también esos terrenos públicos.
Otro de los hallazgos de SMT estriba en que la empresa italiana Bi and Di, tras devastar varios de los diez lotes que el Fonatur le dio en permuta dentro de Malecón Tajamar, los vendió.
Otra revelación fue que pese a que el Fonatur aseguró en conferencia de prensa que todos los lotes ya se vendieron, la revisión hecha en el Registro Público de la Propiedad da cuenta de que muchos predios aún está a nombre de dicho fondo.