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A nueve días del asesinato de la alcaldesa de Temixco, Gisela Mota, el gobernador de Morelos, Graco Ramírez, ratificó que pese a las amenazas sufridas por 13 alcaldes del estado para rechazar el mando único, éste ya se aplica a plenitud en todo el territorio de la entidad.
En Morelos "no daremos un paso atrás", el mando único va, a pesar de los desafíos criminales, y se va a fortalecer pues será ejemplo para su próxima aplicación en Michoacán y Guerrero, recordó.
En rueda de prensa en la ciudad de México, Ramírez Abreu dijo que ya quedó plenamente acreditado que el asesinato de Mota fue "una acción concertada y premeditada que tenía como objetivo instaurar un ambiente de terror entre las autoridades y la ciudadanía.
"En los meses previos a las tomas de posesión de los 33 alcaldes de Morelos pudimos documentar amenazas contra 13 alcaldes electos. Esas amenazas se centraron en 3 demandas que debían cumplir al asumir el cargo: rechazar el mando único y dejar que los delincuentes impusieran al jefe de la policía municipal. Dos: entregar los contratos de la obra pública y tres acceder apagar una renta mensual en efectivo equivalente al 10% del presupuesto municipal".
Reveló que también "otro grupo delincuencial" además de esas condiciones pedía se le permitiera la realización de eventos artísticos y palenques.
Pero aseguró que al continuar con las nuevas administraciones municipales, el modelo de mando único en todo el estado seguirá la reducción de los delitos.
Ramírez y el fiscal del estado, Javier Pérez Durón, hicieron un recuento de las detenciones e indagatorias para esclarecer y detener a todos los autores del crimen de Gisela Mota, alcaldesa de Temixco.
spb
