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Chilpancingo.— La transición en Guerrero concluyó casi de manera tersa. Ayer el priísta Héctor Astudillo Flores rindió protesta como gobernador constitucional del estado en un acto resguardado por fuerzas estatales y federales; las protestas se registraron hasta que el mandatario se retiró.
Luego de jurar a los guerrerenses hacer valer la ley y escuchar las posturas de las fracciones parlamentarias del Congreso local, Astudillo Flores se dirigió a Acapulco para dar un mensaje a la ciudadanía.
En otro evento minuciosamente resguardado y arropado por el gabinete de Seguridad Nacional , llevado a cabo en el Fórum Mundo Imperial, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, acompañado del flamante gobernador, anunció el relanzamiento de la estrategia de seguridad en la entidad “para regresar paz y armonía al estado”.
Tras una reunión privada, se dio a conocer que como parte de la estrategia habrá, a partir de este miércoles, una unidad antisecuestros en Acapulco, ciudad donde entre enero de 2011 y septiembre de 2015 han ocurrido 208 plagios, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
También se informó que el general Alejandro Saavedra, comandante de la Novena Región Militar, encabezará esta estrategia.
Astudillo agradeció la asistencia de Osorio, y de los secretarios de la Defensa Nacional, general Salvador Cienfuegos Zepeda, y de Marina, almirante Vidal Francisco Soberón Sanz, así como la procuradora General de la República, Arely Gómez González; el comisionado nacional de Seguridad, Renato Sales, y al secretario general del Cisen, Miguel Robles.
Apoyo completo. Osorio Chong expresó que el apoyo del presidente Enrique Peña Nieto a Guerrero “será completo”. Anunció que habrá recursos sin precedentes, aunque aclaró que “necesitamos el mayor de los compromisos del propio estado”.
El titular de Gobernación aseguró que en esta nueva etapa de la estrategia de seguridad destacará el trabajo coordinado entre los tres niveles de gobierno.
Porque, dijo, el camino para construir el nuevo Guerrero se hará con la reconciliación, evitando enconos, diferencias y enfrentamientos.
Antes, por la mañana en el recinto legislativo, Astudillo dirigió un mensaje en donde se comprometió a que su gobierno apoyará el esclarecimiento de los hechos del 26 de septiembre de 2014 donde desaparecieron 43 normalistas, y propuso crear una unidad de búsqueda de desaparecidos.
En el evento solemne lo acompañó el secretario de Desarrollo Social, José Antonio Meade, quien comentó en representación del presidente, Enrique Peña Nieto, que la Federación lo apoyará para que cumpla con la conformación del Mando Único y la creación de programas con inclusión social.
Diez años después de perder la gubernatura y de gobiernos perredistas, Astudillo levantó la mano y se comprometió a hacer valer las leyes y reestructurar las policías municipales.
Mucha seguridad. En Chilpancingo, y luego de pasar cuatro filtros de seguridad para ingresar al recinto, se observó a senadores, diputados locales, diputados federales, el ex gobernador Rogelio Ortega, así como sus ex funcionarios.
Además del apoyo federal ya en Acapulco, Astudillo llegó arropado por la plana mayor de su partido: el ex gobernador Rubén Figueroa; el senador y ex gobernador René Juárez; el ex alcalde capitalino, Mario Moreno, así como Manlio Fabio Beltrones, dirigente nacional.
Astudillo, gobernador número 83, quien perdió la gubernatura con las siglas del PRI en 1995 contra el perredista Zeferino Torreblanca, llega al estado en un clima de incertidumbre e inseguridad, pero con el respaldo del presidente Enrique Peña Nieto.
