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aridiana.banos@eluniversal.com.mx
Para el productor Omar Suárez la situación que vive actualmente con su obra "Amor eterno" es algo irregular y arbitrario, porque otra vez han detenido las funciones clausurando el Teatro San Rafael, “esto demuestra que ya es algo muy personal, de querer joder un estreno, a la compañía, para tratar de desacreditar ante los ojos del público algo que está que está legalmente estable, correcto”.
El uso de las canciones de Juan Gabriel en este montaje siguen siendo la manzana de la discordia entre el productor y la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM), a quien se unió Universal Music Publishing como editora de estas obras, para demandar ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) que se suspendiera la temporada de dicho montaje, con el argumento de que se está haciendo uso ilegal de los temas y el nombre de Amor eterno, uno de los temas más recordados del Divo de Juárez.
Por eso Omar aseguró que iniciará una demanda por daño y prejuicios, no sólo como una forma de reparar los daños que esto acarrea sino también para proteger a su familia, ya que minutos antes de la clausura del teatro, dijo haber recibido amenazas en su teléfono que iban directamente a sus hijos.
Omar explicó que el IMPI procedió sin tener las pruebas que demuestren esto, porque están protegiendo el uso de Amor Eterno como marca “pero no es una marca registrada, ni por Juan Gabriel, ni por nadie de su equipo o nadie del país, lo que tengo registrado es una obra de teatro y Juan Gabriel supuestamente tiene una canción registrada con ese nombre ante Instituto Nacional del Derecho de Autor (Indautor), ninguna de las dos partes lo tiene registrado, porque el proceso para registrar una marca y como son palabras es mucho más complejo”, explicó el productor.
Entre las irregularidades que Suárez señaló está el hecho de que ni él, como representante legal de la obra, ni personal autorizado por parte del Teatro San Rafael, recibió los documentos donde se hacía de su conocimiento que por solicitud de la SACM se clausuraría el San Rafael, previa entrega de una fianza de un millón de pesos, por lo tanto no tenían conocimiento de este proceso sino únicamente les hicieron llegar un aviso donde el IMPI le noticaba de la demanda.
Por eso el viernes ellos depositaron otra fianza de un millón 400 mil pesos que contrarrestaba la clausura, pero ahora tendrán que esperar cinco días para que los sellos sean retirados.
“La base legal de la demanda de la SACM son portadas de discos para acreditar la propiedad. El fondo de la demanda no está sustentada y por tal motivo recurren a una fianza”, comentó Omar Suárez.
