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La reina de la salsa Celia Cruz será recordada en la puesta en escena "Celia", pero sólo a través de sus canciones, ya que su vida no será tocada en esta historia que fue adaptada por Luis Felipe Tovar y que tendrá su estreno el próximo 8 de mayo en el Teatro San Benito Abad, para después iniciar una gira por el interior de la República Mexicana.
“No es la vida de Celia Cruz, es un melodrama que tiene las características del estilo de los 40 y 50, con esa dramaturgia, con esa intensidad, con ese tipo de situaciones donde la familia de repente se desintegraba porque aparecía una segunda mujer en discordia, que además trabajaba en un cabaret. Los derechos de la vida de la cantante los tiene otra persona, lo que nosotros estamos usando, gracias a la Sonora Matancera, es la música que cantaba Celia Cruz, para darle toda la alegría, la intensidad y el peso a una historia muy hermosa”, explicó Luis Felipe Tovar, quien además de adaptar el texto, dirige y actúa en este montaje.
Celia será protagonizada por Aylin Mujica, acompañada de Luis Felipe Tovar, Alfredo Adame, Laura Zapata, Alberto Pavón, Alicia Encinas y Lalo Manzano, además de un ensamble de bailarines y la Sonora Matancera, que suman un total de 40 artistas en escena. Todos ellos contarán la historia de Celia, una rumbera que es acusada injustamente de un robo y es sentenciada a prisión, al quedar libre jura vengarse del juez que la mando a la cárcel, logrando su cometido con sus encantos.
Aylin Mujica comentó que para ella era un gran privilegio protagonizar esta puesta en escena, porque le permiten hacer lo que más le gusta, que es cantar y bailar sobre el escenario, pero además recordar a una de las mujeres pilar de la música latina en el mundo, “un 16 de julio de 2003 se fue de este mundo Celia Cruz, una gran cubana, cantante, bailadora y gran paisana mía, pero se fue su cuerpo físico porque ella no ha muerto, y esta obra es un homenaje a su música, con la gran bendición de tener a la Sonora Matancera en vivo, cantando sus grandes canciones”.
Este musical también es un gran regalo para Luis Felipe Tovar, quien confesó, “a lo largo de 38 años de carrera tenía una piedrita en el zapato, por más que he luchado nunca había podido hacer un musical, porque Dios no me regló el don de voz, lo entendí pero nunca quité el dedo del renglón, entonces cuando me invitan a dirigir este proyecto digo: la vida siempre te da una oportunidad que estabas esperando durante mucho tiempo y la tienes que aprovechar”.
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