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Los niños corean su nombre como si fuera todo un rockstar y más allá de divertirse con los elfos y los chocolates, aprenden una que otra lección sobre el medio ambiente y su conservación de la mano de Santa.
En la nueva temporada de la obra de teatro La fábrica de Santa, que estará en el Centro Cultural Teatro 1 durante diciembre, la misión no sólo es entregar juguetes y dulces, sino que la historia espera poder crear consciencia en los niños.
Incluso, algunos de los niños mal portados les dan una lección a los asistentes, sobre lo que tienen que dejar de hacer si no se quieren quedar sin presentes para Navidad.
Los padres aprovechan el momento para soltar: “¿ya viste? ¡tienes que hacerlo!”, y así convencer a sus hijos de que hagan sus labores.
Entre canciones movidas, personajes que aparecen de entre las butacas y juegos de luces, los más pequeños se ríen y también saltan de sus asientos y entienden el momento que pasa el planeta entre la contaminación y la basura.
Para solventar el problema, los duendes de Santa enseñan a los niños lo importante que es reciclar, a reducir el uso de materiales contaminantes desde sus casas.
La comedia, la música y uno que otro artilugio tecnológico hacen entretenido el momento en La fábrica de Santa, que se presentará todos los fines de semana de diciembre con dos funciones cada día.