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chrsitian.leon@eluniversal.com.mx
El alza que el dólar ha tenido en los últimos meses ha tenido una repercusión en el costo de los espectáculos internacionales que se presentan en la ciudad de México.
El caso de la puesta en escena El Rey León y el alto costo de su boletaje es uno de ello, y eso es algo que los responsables de traer al país el nuevo espectáculo de El Circo del Sol Corteo no pretenden hacer.
Aunque para ellos el alza del billete verde les ha implicado una inversión extra, no desean incrementar el costos de la entrada, pues es un compromiso que tienen con el público y porque de hacerlo, afirmaron, nadie iría a verlos.
“Sí nos afecta como empresarios el alza del dólar, porque hacemos los cálculos a una cierta paridad y vendemos el boleto en pesos mexicano y el alza nos afecta. Ojalá el peso recuperara terreno, pero tenemos un compromiso con el público de vender el boleto a determinado precio y eso lo debemos mantener, porque si no lo hacemos la gente dejaría ir”, señaló en Renato Herrera, promotor de eventos especiales de Ocesa.
Eso no impedirá que en esta ocasión los precios para asistir a la Gran Carpa Santa Fe a ver las acrobacias de la compañía canadiense sean más elevados que en otras ocasiones.
Para Renato la razón principal del incremento que tendrá este espectáculo que se presentará a partir del 2 de septiembre, se debe a que dicho montaje es uno de los más complicados logísticamente hablando que el Circo tiene, lo cual aumenta el costo.
“Ahora los precios son parecidos, aunque hay pequeños ajustes que no tienen que ver con el tipo de cambio y donde influyen los gastos de transportación y el tamaño del elenco. Las complicaciones técnicas empujan el alza del costo del boleto”, dijo.
Ahora la puesta llega con 58 artistas, un escenario más grande que tendrá 2 mil 650 butacas, 100 más que en anteriores veces.
Entre las novedades que tendrá este año, es que poseerá un escenario central que cruzará la carpa de un lado al otro creando un formato especial donde el escenario queda en medio de dos teatros, lo cual hace que la experiencia sea distinta.
Asimismo, en esta ocasión los artistas circenses no emularán a insectos, animales o seres mágicos, ahora representarán a otros humanos en un espectáculo que evocará al teatro clásico del siglo XIX, época en la que nacieron las primeras carpas de circo.
“Es un espectáculo complejo, no sólo se carga con el show, no sólo es montar el espectáculo sino montar el inmueble en el que se va a montar. Es un show pesado, su producción es la más pesada actualmente en el mundo, usa para sus transportaciones 95 contenedores grandes que son más de mil toneladas de equipo”, apuntó.
El show no es uno de los más nuevos del Cirque du Soleil, de hecho es una de los más longevos —tiene 10 años de creado y más de 60 ciudades visitadas— algo que para Rebato Herrara es positivo para el espectador.
En sus palabras, la producción que en esta ocasión no contará con ningún artista mexicano y sólo dos latinos, “llega en su mejor punto de madurez y casi perfección que le brindará elementos distintos a las anteriores producciones del circo que se han presentado en México”.