Pobladores del municipio de Parácuaro, Michoacán, recordaron este jueves a su paisano y cantautor mexicano Juan Gabriel a una semana de su muerte, por lo que rezaron el último episodio del novenario, se llevó a cabo una misa en la iglesia del pueblo y una serie de actividades para recordar una vez más a Alberto Aguilera Valadez, oriundo de esta parte de la Tierra Caliente.
Los habitantes de Parácuaro aún tienen la esperanza de que las cenizas del máximo exponente y compositor de la música popular mexicana puedan llegar en un futuro próximo a la tierra que vio nacer a Juanga para darle el último adiós.
Las lágrimas aún coreen por las mejillas de los paracuarenses cuando recuerdan que Alberto Aguilera ya no regresará a saludarlos o a cantarles como les prometió, a pesar de que en los últimos años el cantante declinó a hacerlo, luego de que fuera, al igual que muchos michoacanos, víctima del crimen organizado.
Todos recuerdan al excéntrico artista como una persona que no repartió dinero ni a sus familiares, pero que generó cientos de empleos en esta zona de Michoacán; una buena parte de su equipo de trabajo, incluso, lo conformó con familiares y amigos del pueblo, revela su sobrino Antonio Aguilera.
Con un recorrido en autos y a pie por las principales calles y avenidas de Parácuaro, sus paisanos, familiares y amigos también reconocieron el talento del “Divo de Juárez”.
La verbena popular en memoria de Alberto Aguilera vistió ese pueblo ubicado a 215 kilómetros de la ciudad de Morelia, donde se regaló comida tradicional de la región, preparada por los habitantes y en donde no faltaron los imitadores de Juan Gabriel que hicieron corear nuevamente sus canciones.
cvtp