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aridiana.banos@eluniversal.com.mx
Orgullosa y en voz alta, la cantante Susana Harp expresa: “Yo sí soy un pedacito de Oaxaca, esto es real, yo no sé qué pase en esa tierra, pero todos nos sentimos de ahí, algo nos regala que nos hace voltear constantemente, que nos hace emocionarnos con el otro”.
Es ese inmenso amor a esta región que la ha llevado a dedicarle 20 años de su carrera artística, a difundir por todo el mundo la riqueza musical y cultural de Oaxaca, tiempo que hoy quiere celebrar con un concierto en el Plaza Condesa el 13 de mayo.
“Estoy festejando porque me lo merezco, porque si yo no lo hago quién lo va hacer”, dice
sonriente. La intérprete explicó que se puede dar el lujo de hacer en el escenario lo que quiere hacer, aunque siempre busca un hilo conductor, en esta ocasión será lo mejor de estos 20 años, es decir, habrá temas cantados en lenguas originarias hasta boleros y sones, que fusionará con sonidos contemporáneos.
El estilo que tiene Susana para realizar un disco o grabar una canción incluye una profunda investigación del origen y contexto de lo que canta, y cada que lo presenta en vivo la gente que colaboró con ella también se hace presente.
“Tengo claro que, siempre que doy un concierto, es como salir a la luz para mucha gente, sé que no tener una disquera, ser totalmente independiente, el camino es a pie, sin embargo, me permite escuchar a las personas, sus historias e involucrarme de una manera diferente, me hace sentir totalmente satisfecha haciendo lo que hago”.
Durante estas dos décadas las anécdotas han sido muchas, como el hecho de que la han sacado de muchos festivales culturales por no parecer oaxaqueña, es que su herencia libanesa se deja ver a primera vista, pero sus raíces son profundamente mexicanas, por eso una de sus grandes tareas en este tiempo es el quitar el estereotipo que se tiene del artista oaxaqueño.
Parte de su estrategia para lograrlo es la preparación de un álbum-DVD que ella considera como una Guelaguetza, porque dará un panorama de todo lo que es Oaxaca, “es una fusión de danzas, con un montón de paisajes increíbles, porque quiero mostrar este Oaxaca desde la música, la parte visual, desde todo lo que implica los Lunes del Cerro”.
Como parte de este festejo Susana realizó una compliación títulada 20 años de son, donde reúne lo hecho en cinco discos. “Yo fui la que elegí lo mejor de cada uno, lo más representativo, algunas piezas que no están en ninguna producción pero que en vivo las piden mucho, traté de hacerlo con honestidad, dicendo así ha pasado el tiempo”.
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