A más de cuatro años de la muerte de Amy Winehouse, la madre de la británica reveló que la artista pudo haber padecido algún tipo de transtorno neuropsiquiátrico.
Janis Winehouse recordó que la infancia y adolescencia de la intérprete de "Back to Black" fue difícil, debido a los problemas que tuvo con sus compañeros de colegio por su personalidad desordenada y, a ratos, caótica.
"Ella perfectamente pudo haber tenido Tourette, donde simplemente decía las cosas...Pero no lo sabemos", dijo la progenitora de la fallecida cantante, quien fue apodada "Huracán Amy" durante su etapa escolar.
El Síndrome de Tourette se caracteriza por múltiples tics físicos y vocales, los cuales con muy difíciles de controlar por quienes lo padecen.
Winehouse falleció a los 27 años, el 23 de julio de 2011, debido a una intoxicación por alcohol. Al momento de su muerte la artista estaba en medio de una terapia de rehabilitación.
La cantante también fue adicta a la heroína, pero ésta dependencia sí logró mantenerla bajo control durante la última etapa de su vida.
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