Los dos auditores involucrados en la embarazosa confusión al final del Oscar no trabajarán de nuevo en la ceremonia, dijo un portavoz de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas ayer.
Brian Cullinan y Martha Ruiz fueron los dos representantes de PricewaterhouseCoopers —la firma responsable de contar y salvaguardar los votos y resultados del Oscar— responsable de entregar los sobres con los ganadores a los presentadores de los premios.
Después que Ruiz entregó a Leonardo DiCaprio el sobre con el triunfo de Emma Stone, Cullinan, que estaba del lado izquierdo, tenía que haberse deshecho del duplicado, pero por error se lo dio a Warren Beatty y Fay Dunaway en lugar del de Mejor Película.
Y en vez de anunciar como ganadora a Moonlight, se lo dieron a La La Land.
Fue el error más vergonzoso en la historia del galardón más importante del cine.
La prensa especializada ha insistido en como Cullinan estuvo muy activo en redes sociales durante la ceremonia, al punto que minutos antes de entregar el sobre errado a Beatty, publicó una foto de Emma Stone tras recibir el premio.
PricewaterhouseCoopers, que asumió la culpa después que terminó la gala y dijo que Cullinan estaba muy afectado por su error, no respondió aún a los llamados para comentar la decisión de la Academia.
Cheryl Boone Isaacs, presidenta de la Academia, dijo a la revista The New Yorker que quedó horrorizada con el final desastroso de uno de los programas de televisión más vistos en Estados Unidos.
“Solamente pensé ‘¿qué? ¿Qué?' Volteo y veo a un miembro de Pricewaterhouse llegando al escenario y dije ‘Oh no, ¿qué está pasando? ¿Qué? ¿Qué? ¿Qué? ¿Cómo es posible”, recordó.
“Y luego sólo pensé: ‘Oh Dios, ¿cómo pasó esto? ¿cómo... esto... cómo pasó?”