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ariel.velazquez@eluniversal.com.mx
Cuando el 13 de mayo de 1950, en Silverstone, Inglaterra, la Fórmula Uno comenzó, el estado físico de los pilotos y su edad eran temas irrelevantes y se apostaba por el temperamento y la experiencia con la que cuentan los adultos que superan los 40 años.
El argentino Juan Manuel Fangio se convirtió en campeón mundial a los 46 años. Hoy, una edad en la que ya no se puede figurar, si tomamos en cuenta que Jenson Button dirá adiós a la máxima categoría con 36 años y hasta ahora 300 Grandes Premios comenzados.
Al igual que Button, el brasileño Felipe Massa se despedirá al final de la actual campaña con 35 años.
Dos hombres pertenecientes a la vieja guardia del automovilismo que comenzaron cuando los monoplaza eran ocho o hasta 10 segundos más veloces.
Con 37 años en la actualidad y un campeonato conseguido en 2007 con Ferrari, Kimi Raikkonen quedará como el piloto de mayor edad en la parrilla, seguido del español Fernando Alonso, con 35, y quien en su etapa con Renault consiguió dos títulos mundiales.
Fernando Alonso vio la luz en el Gran Circo en la campaña de 2001 a bordo de un Minardi. Desde ese momento acumula 32 victorias y 97 presencias en el podio. A partir de 2017, sumará una nueva condecoración como piloto con más experiencia de la Fórmula Uno, con 268 competencias iniciadas.
El asturiano quedará como el estandarte de la vieja guardia del deporte motor de máxima exigencia. Lewis Hamilton es otro de los volantes que rebasan la barrera de los 30, pero su debut llegó en 2007, cuando tenía 22 años.
Con la disminución de los cilindros en los autos, también ha llegado un descenso en la edad de los volantes que aparecen en F1.
Max Verstappen es el ejemplo de ello. Debutó con 16 años en la Fórmula Uno y en el Gran Premio de España consiguió cruzar la meta antes que nadie para convertirse en en el ganador más joven.
El holandés logró adelantar a Lewis Hamilton y Nico Rosberg, ambos de la escudería Mercedes Benz, luego de que colisionaran.
Verstappen es el rival a vencer para las próximas temporadas de Fórmula Uno y la envidia de la vieja guardia, que se va despidiendo.
