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La equitación es uno de los deportes más nobles de los Juegos Olímpicos. En éste, el cuidado del animal es tan importante como su adiestramiento. Y así lo entendió Adelinde Cornelissen.
La holandesa notó que su caballo, Parzival, tenía temperatura alta antes de iniciar la competencia y por eso eligió simplemente saltar a la arena para saludar y despedirse.
"Con tal de protegerlo, decidí renunciar. Mi compañero, mi amigo, el caballo que lo ha dado todo por mi toda su vida no se merece que lo ponga en peligro", explicó en Facebook la atleta de 39 años ganadora de una medalla de bronce y otra de plata en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
La misma Adelinde explicó el problema en su cuenta de Facebook: "Después del doble control con los veterinarios, la conclusión fue que el caballo había sido mordido por un insecto, araña o algún tipo de animal que produce sustancias tóxicas. El caballo contrajo fiebre y tenía la cabeza hinchada el día antes del evento. Le dieron líquidos, le hicieron pruebas de sangre y pasó por los Rayos-X".
Aunque su temperatura bajó, al igual que la hinchazón, la mujer nunca se separó de su caballo: "Dormí en los establos y revisé cada hora como estaba Parzi , no iba a dejarlo solo", dijo.
Técnicamente se le dio luz verde para competir a Parzival, contó Adelinde, pero al no sentirse completamente segura, la jinete decidió que vale más el bienestar de su caballo que cualquier medalla, y se retiró de la competencia: "Quería protegerlo, por eso decidí renunciar.", explicó después a los medios la holandesa.
Adelinde contó que hace unos días había decidido no competir, ya que el estado de salud de su caballo no era óptimo, pero tras varios exámenes médicos se llegó a la conclusión de que el animal había mejorado y estaba listo para competir. Pero, minutos antes de iniciar la prueba su temperatura corporal volvió a subir y ella eligió abandonar en ese mimo momento.
Parzival se encuentra totalmente recuperado y listo para volver al ruedo en cuanto su entrenadora así lo disponga: "Estoy feliz. Parzi es feliz y está en forma otra vez", señaló en las redes sociales Cornelissen, quien también agradeció a todos aquellos que se preocuparon por la salud de su "amigo inseparable".
Adelinde, se ganó la medalla de oro al corazón.
lsm