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Lausana.— México no corre peligro de ser marginado de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, ya que el COI no halló evidencia de interferencia gubernamental con sus federaciones deportivas.
Pere Miró, el subdirector general del COI, dijo ayer que el gobierno mexicano le aseguró que respeta la autonomía de las organizaciones deportivas nacionales y que no se meterá con su liderazgo.
El COI se opone a cualquier forma de interferencia política y dice que los gobiernos deben respetar la autonomía del olimpismo.
Dirigentes deportivos mexicanos expresaron preocupación de que el país fuera suspendido por el COI, y se perdiera los Juegos del próximo año en Río de Janeiro, debido a un conflicto con el gobierno.
Los organismos deportivos encaran fiscalización del gobierno, que quiere averiguar cómo gastan los fondos públicos.
Miró indicó que “no hay un caso” de interferencia, y agregó que la solicitud del gobierno para que las federaciones deportivas expliquen cómo gastan los fondos “es más que legítima”.
Miró señaló que en la sesión de hoy reportará sus hallazgos a la junta del COI.
A fines de octubre, el COI suspendió al Comité Olímpico de Kuwait por interferencia gubernamental, por lo que los atletas de ese país quedaron en un limbo de cara a los Juegos de Río.
Sin embargo, Miró aseguró que la situación de México es completamente distinta.
“No creemos que haya un problema importante ni un conflicto con la Carta Olímpica o con la autonomía”, dijo a periodistas. “El gobierno solicitó a algunas federaciones nacionales que expliquen [el uso] del dinero que el gobierno les ha dado. Eso es más que legítimo. Eso está totalmente bien”.
La única preocupación no tiene que ver con los “hechos”, sino con algunas declaraciones de oficiales gubernamentales insinuando que podrían reemplazar a los líderes de ciertas federaciones, dijo Miró.
“No pueden hacer eso”, indicó. “Eso sí sería interferir con la autonomía de las federaciones”.
Alfredo Castillo, director de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), ha criticado la Carta Olímpica al considerarla como “el mejor invento jamás creado para evitar fiscalización de cómo se gasta el dinero público”.
Desde que asumió el mando de la Conade el 17 de abril, Castillo ordenó auditorías a las asociaciones de remo y tiro con arco, desconoció a las federaciones de lucha, frontón y boxeo, basquetbol y revocó el registro de la de beisbol por irregularidades financieras y administrativas.
Mientras las federaciones deportivas nacionales reclaman autonomía, la Conade exige la correcta comprobación de recursos que da el Gobierno a las federaciones.
Miró dijo que hubo una comunicación escrita entre el COI y un ministro mexicano a cargo de deportes, quien dijo al COI que el gobierno continuará fiscalizando el uso del dinero público, pero “respetando completamente la autonomía” olímpica.
“La carta es muy satisfactoria”, indicó Miró. “Si actúan como dicen, todo está bien con nosotros”.
El COI pidió al presidente del Comité Olímpico Mexicano y al secretario general de la Organización Deportiva Panamericana, Carlos Padilla, que medien en caso de que haya una disputa entre el gobierno y los organismos deportivos.
