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Un total de 90 atletas de alto rendimiento del estado de Hidalgo, entre los que se encuentran menores de edad y 33 entrenadores, recibieron suplementos alimenticios caducos de parte del Instituto Hidalguense del Deporte, que obtuvo una donación de estos productos de parte de una empresa particular.
De acuerdo con la vocera de esta dependencia Liliana Guarneros, no hubo mala fe o dolo en la entrega de los productos.
"Tenemos una carta de la empresa en donde se explica que la caducidad corresponde al tiempo de vida en los anaqueles, pero que estos tienen un margen de seis a ocho meses en que se pueden consumir", aseveró.
Explicó que la empresa Maxiba S.A de C.V se acercó al instituto para ofrecer la entrega de los suplementos, sin embargo sobre la leyenda de caducidad se puso una cinta para informar que estaban libres de venta.
"Se trata de productos muy caros con costos de mil a 2 mil pesos, por eso se puso esa etiqueta", precisó.
Se trató de un lote de 973 botes del producto conocido como UPN de los cuales se repartieron 369 botes de la proteína en polvo, tres por cada uno de los atletas y entrenadores.
En bodega aún hay 609 botes de acuerdo con datos de la Dirección de Planeación, Administración y Finanzas, área que efectuó el convenio de donación
Guarneros expresó que hay muy pocas empresas que le apuestan al deporte. Aclaró que el error fue que no se informó que el producto estaba caduco, por ello, dijo, se despidió a la persona encargada de mercadotecnia.
"Hubo un despido porque la persona de mercadotecnia si sabía que el embarque estaba caduco y no dijo nada, pero este no tiene ningún problema para ser consumido", insistió la funcionaria.
Precisó que la información se hizo del conocimiento de todos los atletas para quien decidiera consumir o regresar los suplementos lo hiciera, "lo cierto es que nadie regreso, afirmó.
Reiteró que no hubo en ningún momento ni de parte de la empresa donante o del instituto un problema de dolo o de irresponsabilidad.
afcl
