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Un juez español otorgó el lunes libertad bajo fianza al presidente suspendido de la federación española de futbol, que estaba encarcelado por una acusación de corrupción.
Santiago Pedraz, juez de la Audiencia Nacional, había negado la fianza a Ángel María Villar el 20 de julio, dos días después que el acusado de 67 años, su hijo y otros dos funcionarios del fútbol fueron arrestados durante operativos. Pero el juez Pedraz acordó el lunes la fianza a Villar, su hijo Gorka Villar y al vicepresidente suspendido de la federación, Juan Padrón.
La fianza para Villar y Padrón fue fijada en 300.000 euros (352.000 dólares), y para Gorka Villar en 150.000 euros (176.000 dólares).
El juez confiscó sus pasaportes y les ordenó presentarse semanalmente a la corte y proporcionar números telefónicos para contactarlos a todas horas.
Un comunicado del tribunal señaló que el juez tomó la decisión de otorgarles la fianza dado que las medidas que han sido tomadas de antemano les dificultan a los acusados interferir con la investigación.
A un cuarto sospechoso, Ramón Hernández, secretario de la Federación Regional de Fútbol de Tenerife, de antemano le había sido otorgada una fianza de 100.000 euros (117.000 dólares), que ya pagó.
Un fiscal estatal los acusó de cargos de administración desleal, apropiación indebida, corrupción y falsedad documental.
Villar, que desde 2008 preside la federación española de fútbol, fue suspendido del cargo suspended por un año la semana pasada por la máxima autoridad del deporte en España, el Consejo Superior de Deportes (CSD). También renunció a las vicepresidencias de la FIFA y la UEFA.
Villar es sospechoso de haber desviado fondos públicos y privados recibidos por la federación desde 2009. Documentos de las cortes indican que además de esa malversación de fondos, a Villar se le acusa de corromper a varias federaciones regionales ofreciendo favores a cambio de votos para permanecer en el poder durante ocho términos consecutivos.
Bajo su presidencia de la federación española, la selección ganó el Mundial de 2010 y la Eurocopa en 2008 y 2012. La federación española se encarga de las selecciones nacionales, la Copa del Rey, el calendario de las competencias y el nombramiento de árbitros, entre otras funciones. No administra las dos primeras divisiones del fútbol español.
La fiscalía también acusa a Villar de programar partidos amistosos de la selección para beneficiar a su hijo Gorka, quien hasta el año pasado fue asesor legal y mano derecha de tres expresidentes de la Conmebol que están imputados de corrupción por las autoridades estadounidenses.
