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Las dos más recientes ocasiones que volvieron al camerino, tras un partido, lo hicieron con los labios sabor acre. Perder ante los Pumas, por la Liga, y el Querétaro, dentro de la Copa MX, provoca dolor entre los Cementeros, aunque la pesada carga de la presión aún no está sobre ellos, según ataja el refuerzo chileno Martín Rodríguez.

“Claramente, no teníamos pensado empezar de esta manera, pero a ninguno nos está llegando la presión”, revela el atacante sudamericano, en conferencia de prensa previa al entrenamiento cruzazulino. “Recién estamos iniciando, trabajando súper bien, muy alegres, a gusto con el director técnico [Francisco Jémez], así es que falta poco para obtener los resultados esperados”.

Anhela que todo comience esta tarde, cuando reciban al invicto Monterrey, cuya plantilla (valuada por el sitio especializado “Transfermarkt.co.uk” en 52.9 millones de dólares) lo convierte automáticamente en candidato a dar la vuelta olímpica.

“Obviamente que en casa no podemos dejar puntos. Somos locales y tenemos que hacer valer esa condición”, advierte. “La presión, es muy pronto para pensar en eso. Estamos trabajando de muy buena manera y pronto van a llegar los buenos resultados”.

Pese al potencial de sus futbolistas, los Rayados lucen como el contrincante idóneo para lograrlo. El equipo hoy dirigido por Antonio Mohamed suma seis visitas sin éxito a la antigua Ciudad de los Deportes (un empate y cinco derrotas), donde tiene 316 minutos de anemia ofensiva.

“Las estadísticas no avalan algo. Nosotros solamente estamos pensando, trabajando y preparando el partido para traernos la victoria”, afirma Rodríguez. “Monterrey tiene a jugadores, del medio [campo] hacia arriba, que son muy peligrosos, rápidos y hábiles. Hemos estado trabajando para ganar”.

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