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El América comenzó su andar en la Copa MX con un triunfo en casa 3-2 como local ante Santos.
Partido que comenzó cuesta arriba para el conjunto de las Águilas. En cuanto un tiro libre de Ulises Dávila se incrustó en la portería de Agustín Marcehsín, comenzaron los recuerdos y la nostalgia por Moisés Muñoz.
El envió del jugador santista se incrustó en el poste que cubría el portero americanista, pero que no pudo contener. Habían pasado apenas 25 minutos del encuentro y los azulcrema ya tenía que remar contra la corriente, con una acción de su guardameta, que bien pudo catalogarse como un error. Sin embargo, sus compañeros lo rescataron.
Comenzó la remontada. Osmar Mares puso un tiro a la base del poste, cuyo rebote fue a dar a las redes de los laguneros. Tranquilidad en Santa Úrsula, porque el América logró nivelar el marcador (38’).
Esa diana impactó directo en la autoestima de ambos equipos. Las Águilas se enavlenatonaron para buscar la victoria.
Ésta comenzó a encaminarla un hombre que estuvo a punto de irse por la puerta trasera de la institución de Coapa: Carlos Darwin Qunitero. Pero el colombiano, aferrado a la camiseta amarilla, logró marcar un golazo cuando agonizaba la primera mitad.
El artillero emplumado sacó un disparo colocado y al ángulo, como un mensaje que buscó evidenciar su valía en el América (43’).
Santos reaccionó, pero cedió un tercer tanto inalcanzable para sus aspiraciones. Silvio Romero aprovechó un centro de Mares para bajar el balón de pecho y definir a las redes (55’). La alegría para el americanismo ni siquiera la amargó el ex águila, Osvaldo Martínez, quien puso en el ángulo un tiro libre (66’). Victoria amarilla, la primera en la búsqueda de la Copa.
