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Cada que siente dolor en el tobillo derecho y observa al América desde la tribuna o por el televisor, Moisés Muñoz recuerda la fatídica tarde del domingo 3 de junio de 2012, esa en la que la tragedia le coqueteó.
Apartado de las canchas por el esguince que sufrió hace poco más de un mes y de la titularidad americanista algunas semanas antes, a causa de una baja de juego, el arquero está convencido de que saldrá adelante... Y para muestra, el accidente automovilístico que casi le cuesta la vida hace cuatro años.
Tras vacacionar y en camino a reportarse para la pretemporada de las Águilas, la camioneta en la que el michoacano y su familia se dirigían a la Ciudad de México sufrió un percance cerca de Atlacomulco, Estado de México.
Él conducía y fue quien resultó con mayores daños. El principal, en la mano izquierda, por lo que fue intervenido quirúrgicamente, pero las consecuencias habrían sido fatales de no ser por la casi inmediata llegada de servicios médicos, quienes trasladaron en helicóptero —a todos los lesionados— a un hospital de la capital del país.
Tardó casi cinco meses en volver a jugar con el América, por lo que está convencido de que su nebuloso presente no le vencerá.
“He vivido momentos mucho más difíciles que eso... Incluso, algunos en los que —por circunstancias del destino— estuve entre la vida y la muerte, así es que esto es mucho más fácil de digerir y del cual me voy a reponer de una manera similar”, sentencia Muñoz, quien no participa con los azulcrema desde el 27 de febrero, cuando fue titular en la goleada sufrida ante los Tigres (1-4). “Sé que, en el momento que regrese, lo haré en mi mejor nivel futbolístico, físico y mental, que es lo más importante”.
La lesión que actualmente padece se presentó el sábado 9 de abril, contra los Xoloitzcuintles de Tijuana, en la categoría Sub-20. Ya había sido suplente para los juegos ante el Morelia, el Guadalajara, el León y los Jaguares de Chiapas.
Una semana antes de aquel estrepitoso revés frente a los actuales campeones, sólo jugó 13 minutos en la igualada con el Cruz Azul (3-3), debido a problemas en la córnea derecha tras chocar con Joffre Guerrón. Su complicidad en algunas anotaciones de los felinos regiomontanos provocaron suspicacias sobre que no estaba del todo bien.
“No es el momento más complicado [de mi carrera]”, insiste. “Después del accidente estuve fuera muchísimo tiempo... E instantes también de desesperación por la misma recuperación, la cual no fue tan rápida como yo quería”.
“Ahorita estoy viviendo un momento tal vez similar, pero con mucha autorreflexión de saber que, en el momento que regrese, tengo —de alguna manera— una gran responsabilidad, porque el equipo está marchando de manera correcta y tengo que volver en igualdad de circunstancias, sobre todo con un muy buen nivel futbolístico, el cual sé que lo puedo dar, lo tengo, y confío mucho en que así va a ser”.
Jamás ha dudado de que tendrá la oportunidad de volver a ser titular, más allá del buen momento que actualmente vive Hugo González.
Ese crédito, asegura, está ganado con base en los dos títulos de Liga obtenidos con los azulcrema, en especial el del Clausura 2013, ese en el que marcó el gol que obligó al alargue en una eliminatoria que lucía perdida ante el Cruz Azul.
“Considero que sigo siendo el portero, no en este momento titular, porque estoy lesionado, pero sé que tengo la confianza de mi director técnico [Ignacio Ambriz], directiva, para que —en el momento que me encuentre al 100%— regresaré a la cancha”, afirma. “Me he ganado ese respaldo a lo largo de todos mis años de trayectoria”.
“Soy un portero de Selección Nacional y sé que, en el momento que esté al 100%, tendré esa oportunidad de regresar a la cancha y de ahí todo dependerá de lo que haga para poder permanecer, seguir cosechando triunfos con el América”.
Club en el que tiene contrato hasta diciembre, por lo que anhela una revancha en el Mundial de Clubes, no sin antes sostener una lucha deportiva con el hombre que hoy resguarda el arco azulcrema, para quien sólo tiene elogios.
“Hugo González es un extraordinario portero, por eso está en América y ha permanecido aquí durante mucho tiempo”, subraya. “Sé perfectamente que, el día que me vaya, él será el que se quedará con ese puesto y el que seguirá levantando triunfos y títulos con este equipo”.
En el que pretende volver a jugar, porque no se dejará vencer.
