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daniel.blumrosen@eluniversal.com.mx
Han sido dos extrañas semanas para Damián Álvarez. Cerca del ocaso de su carrera, el argentino naturalizado mexicano cumplió uno de los más grandes sueños que abrazó desde que aprendió a patear un balón: jugar la final de la Copa Libertadores de América.
Simpatizante del River Plate, el ‘Enano’ anhelaba jugar la serie por el título del continente con los Millonarios en la cancha. También se le dio, pero el destino quiere que como rivales.
Eso explica la peculiaridad de estos días. Su familia es seguidora del club que presume una banda roja en el pecho, mas ha tenido que dividir su corazón, a causa de un genuino tigre con alma de millonario.
Damián no lo parte. Quiere levantar el trofeo continental, aunque sea a costa del club de sus amores.
—¿Qué sentimientos experimentas al jugar la final contra el equipo con el que te has identificado siempre?
“La verdad, dentro de la cancha, las sensaciones son de querer ganar… Más en una final de Copa Libertadores. Nadie me saca de la cabeza que quiero ganarla y mis compañeros también. Sea River o el equipo que nos haya tocado. En este caso, involucra un poco mi pasado, pero [estoy seguro] 100% que quiero ganar”.
—¿Cómo lo toman tus familiares que viven en Argentina?
“Espero que me reciban bien. Ojalá que me acompañen, para que sea un festejo completo. Es difícil para los dos”.
—También tienes a muchos amigos que simpatizan con el River Plate ¿Te han pedido que aflojes un poco para ayudarlos?
“Ellos me conocen bien. Nunca voy a abandonar mi profesionalismo, no lo voy a dejar de lado. Lamentablemente, son 90 minutos en los que me aparto 100% de ellos y lo que siente mi familia. Nada más quiero ganar la Copa. Cuando uno es futbolista, nunca tiene que involucrar sentimientos. El profesionalismo va ante todo. No hay alguna duda sobre eso. Estamos parejos en todos los sentidos”.
—Existe la posibilidad de que seas suplente en el partido en el estadio Monumental ¿cómo lo tomarías?
“Quiero jugar todos los partidos, no me gusta estar fuera… Y menos en estos momentos. Ojalá que tenga la oportunidad”.
—Si no le hubieran ganado aquel juego al Juan Aurich, River Plate ni siquiera habría clasificado ¿se arrepienten de haberlo dejado con vida?
“Eso ya quedó atrás. Siempre hemos sido honestos con la competencia, más allá de muchas cosas que se dijeron y el mérito de llegar a la final es de los dos equipos. Muchos nos adjudican que ayudamos a River porque le ganamos al Aurich, pero ellos también hicieron lo suyo. Salimos a ganar en una cancha difícil en Perú, no hay más que decir. Siempre fuimos muy competitivos y hoy estamos merecidamente en la final”.
—¿Esperas al River Plate igual de precavido que en el encuentro de ida?
“Hay que esperar a ver cómo se dan los partidos. Va a ser distinto, por la búsqueda del resultado de River. No creo que lo plantee de la misma forma y nosotros debemos ser inteligentes, saber en qué momento golpear”.
