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Aguascalientes.— El presidente del Supremo Tribunal de Justicia de Aguascalientes, Juan Manuel Ponce, informó que en el caso del jugador Luis Antonio Gorocito, las autoridades de Aguascalientes tendrán que ponerse en comunicación con el Consulado uruguayo para que se conozca del proceso que se sigue en su contra y se le proporcione asistencia consular.
De acreditarse la culpabilidad del jugador Gorocito y de su compañero Alejandro Molina Núñez, ambos del Necaxa, en el delito de lesiones dolosas agravadas, podrían obtener un castigo de 8 a 12 años de prisión, de acuerdo con el Código Penal del estado.
El estudiante universitario Luis Rodolfo Mariscal permanece en la cama 3 de terapia intensiva del hospital Hidalgo, con un coma inducido por el traumatismo craneoencefálico que presenta, con un diagnóstico clasificado como grave. A su lado, su madre Teresa López pidió oraciones para su hijo, quien se encuentra “muy grave”, mientras recupera su salud.
“Pido oraciones. A mí lo único que me interesa es la salud de mi hijo. Lo otro se lo dejo a la justicia”, dijo la señora, con relación a los futbolistas necaxistas que lo golpearon.
“Que los demás se encarguen de ellos, no pido nada, no quiero nada en contra de ellos. No pido nada en contra de ellos, sólo pido oraciones para mi muchacho, para que se me componga. ¡A todos les pido oraciones!”, señaló.
“Mi hijo, un muchacho muy alegre, muy feliz, sigue en terapia intensiva, está muy grave”, añadió la madre en las afueras del hospital Hidalgo.
Versión de jugadores. De acuerdo con lo expuesto por los deportistas ante el Ministerio Público, Gorocito describió que la madrugada del domingo salió del bar denominado La Cantinita alcoholizado y que se dirigió a su vehículo (BMW). Recuerda que se agredió con otras personas de forma verbal, que recibió varios golpes y que no recuerda a quién golpeó.
Asimismo, Gorocito dijo que luego abordó su automóvil y una persona se le puso enfrente y comenzó a golpear su vehículo, por lo que de nuevo descendió de la unidad y volvieron a pelear, y después salió del estacionamiento en compañía de Alejandro Molina Núñez, pero luego fue alcanzado por una patrulla y detenido.
Por su parte, Alejandro Molina compartió a la Fiscalía que la madrugada del domingo estaban en La Cantinita con varios compañeros tomando cerveza y que cuando salió del bar observó a varias personas que estaban golpeando a Gorocito, por lo que se dirigió hacia allá en su auxilio.
En su declaración, tres acompañantes de Luis Rodolfo Mariscal coinciden que al salir del bar La Cantinita iban cantando y bailando y un sujeto al que identifican como Gorocito les lanzó insultos llamándolos ridículos, luego se escuchó la frase: “¡Mamacita, qué rica estás!” dirigida a Susan Griselda López, por lo que un amigo de ellos de nombre Roberto pidió respeto a los deportistas y eso inició el pleito.
Susan López declaró que Gorocito se acercó a Roberto y le dio un golpe y después los dos jugadores se acercaron a Luis Rodolfo Mariscal y le pegaron hasta derribarlo y estando tirado en el piso le dieron múltiples puntapiés en el cuerpo y en la cabeza, y que cuando él ya estaba inconsciente lo siguieron pateando.
