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Con una brillante tarea de Stephen Curry, Golden State Warriors quedó a una victoria de repetir
su título en la NBA al vencer hoy como visitante por 108-97 a Cleveland Cavaliers en el cuarto partido de la serie final de la Liga estadounidense de baloncesto.
Después de tres partidos en los que no brillaron, los "Splash Brothers" Curry y Klay Thompson volvieron a ser la carta del triunfo de los vigentes campeones, con una ráfaga anotadora en el tercer cuarto, cuando Golden State dio vuelta el partido.
Curry, jugador más valioso de la serie regular, logró 38 puntos y seis asistencias, con 7-13 triples, para liderar la ofensiva de los Warriors. Thompson, con 25 puntos y 4-9 tiros de tres puntos, lo secundó a la perfección.
Para los Cavaliers no fueron suficientes los 34 tantos de Kyrie Irving ni otra tarea completa de LeBron James, que rozó un nuevo triple doble con 25 puntos, 13 rebotes y nueve asistencias.
Kevin Love, que se había perdido el tercer partido por una conmoción cerebral, regresó a la acción como suplente, con un aporte de 11 puntos y cinco rebotes.
El encuentro de hoy en el Quicken Loans Arena de Cleveland resultó el más atractivo de la serie hasta el momento, porque la paridad estuvo marcada hasta el último cuarto.
De la mano de Irving y James, los locales llegaron a la pausa con una pequeña ventaja (55-50) y amenazaron con una escapada en el tercer cuarto, cuando llegaron a sacar ocho puntos de diferencia.
Pero entre Curry y Thompson se encargaron de frenarla con sus triples, para entrar al último parcial con dos puntos a su favor (79-77).
Por más que Cleveland no se entregó nunca, la solidez de los Warriors y sus variantes pesaron más en el cierre, al que llegó con una ventaja que oscilaba entre los cinco y los ocho puntos.
Los Cavaliers apelaron a las faltas constantes para frenar el reloj, pero entre Curry (9-10) y Thompson (7-7) sentenciaron el partido desde la línea de personales.
Con la serie 3-1, Golden State tiene la posibilidad de conseguir el bicampeonato el lunes en casa, cuando se dispute el quinto partido.
Después de completar la mejor serie regular de la historia con un récord de 73 victorias y nueve derrotas y convertirse en uno de los diez equipos en toda la NBA capaces de regresar de un 3-1, como lo hicieron ante Oklahoma City Thunder en la final del Oeste, los Warriors están a un triunfo de coronar una temporada de ensueño.
