La célebre Escalinata de Trinitá dei Monti, en la céntrica Plaza de España de la capital italiana, fue reabierta hoy tras casi un año de trabajos de restauración, financiados con una donación de 1.5 millones de euros de la marca de joyas Bulgari.
"A partir de hoy la Escalinata de Trinitá dei Monti, una de las más grandes joyas artísticas del mundo, retorna a ser plenamente disfrutable", dijo la alcaldesa de Roma, Virginia Raggi, en la ceremonia de inauguración del monumento.
Anunció que para evitar un uso "inapropiado" de la escalinata, normalmente atiborrada de turistas y escenario de borracheras y desórdenes, ha sido emitida una ordenanza especial.
"Habrá un monitoreo especial por parte de las fuerzas del orden y no será cerrada de noche", aseguró Raggi.
Agradeció a la empresa de joyas por el patrocinio de los trabajos de restauración, iniciados en octubre de 2015.
Al respecto, el director general de la famosa marca de joyas, Jean Christophe Babib, comentó que con motivo de la celebración del 130 aniversario de la Maison en 2014, "decidimos adoptar esta maravillosa joya de arquitectura barroca".
"Hoy estamos contentos de festejar con la ciudad la restitución de un monumento que retorna a representar en todo su esplendor la grandeza de Roma", declaró.
Dijo que para su empresa, "la escalinata será siempre un lugar sinónimo de alegría y glamour, indisolublemente vinculado con la identidad de la Maison", que justamente en 1884 abrió su primera tienda a unos pasos de Trinitá dei Monti.
Según el superintendente de Bienes Culturales de Roma, Claudio Parise Presicce, los trabajos de restauración de la escalinata se concentraron en la limpieza, consolidación y protección de todas las superficies del monumento.
También fueron reconstruidos algunos escalones dañados con el tiempo para garantizar la seguridad y se realizaron monitoreos estáticos en los muros de contención de las rampas superiores.
La escalinata domina la Plaza de España y fue realizada completamente con mármol travertino y lápidas celebrativas también en mármol.
Fue realizada entre 1723 y 1726 por el arquitecto romano Francesco De Sancti (1693-1740), como recorrido escenográfico entre la colina del Pincio y la iglesia de la Santísma Trinidad con la Plaza de España y la fuente de la Barcaccia, situadas a sus pies.
El monumento será reabierto al público este viernes, pero para festejar su restauración la noche de hoy habrá un concierto en el que serán sorteados los lugares para permitir la asistencia de 30 ciudadanos.
En la velada, que correrá a cargo de la Orquesta de la Academia Nacional de Santa Cecilia, también participarán 10 detenidos de la cárcel de máxima seguridad de Rebibbia que hayan trabajado voluntariamente a favor de la ciudad.
Y es que, según Raggi, ya quedaron atrás los tiempos en que ese tipo de eventos estaban abiertos solamente a personajes famosos.