Más Información
Investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Científicas de Francia y de la Universidad de Valencia (España) han demostrado la utilización de carbón vegetal como materia prima para los pigmentos negros utilizados en las pinturas rupestres neolíticas.
Según informó el gobierno regional valenciano, las investigaciones se realizaron en el abrigo de Les Dogues de Ares del Maestre (Castellón, este) y se han aplicado nuevas técnicas de análisis en el estudio del arte levantino que permiten reconstruir las "recetas" utilizadas en la elaboración de sus pigmentos.
El estudio desarrolla un novedoso protocolo multidisciplinar para la caracterización de los pigmentos prehistóricos que combina el análisis físico-químico, el análisis de la gestión de los recursos vegetales en la arqueobotánica y la arqueología experimental.
Además, este protocolo permite identificar la cadena de gestos técnicos realizados en la elaboración de los pigmentos, una manifestación gráfica única en el marco de la prehistoria europea, cuyas pinturas se localizan en los abrigos del arco mediterráneo de la península Ibérica.
A pesar del reducido tamaño de los pigmentos de Dogues y del deterioro de las pinturas, se ha podido realizar un análisis arqueobotánico de las muestras donde se han identificado células vegetales de coníferas y de angiospermas, plantas documentadas en la zona de Ares del Maestre durante el Neolítico.
El mal estado de conservación de dichas células y su obstrucción por alguna sustancia densa sugieren, por un lado, un proceso mecánico de molturación del carbón vegetal y, por otro, la utilización de alguna sustancia aglutinante que no se ha podido identificar.
Para confirmar estas hipótesis, los investigadores reprodujeron un lápiz de muestra experimental similar a los originales, a partir de fragmentos carbonizados de pino carrasco, que ha sido aplicado directamente sobre la roca.
Tras moler el carbón vegetal de coníferas y angiospermas actuales con estructuras vegetales similares a las identificadas en las investigaciones, se elaboraron distintas recetas, en las que se incluyeron sustancias susceptibles de haber sido utilizadas por las sociedades neolíticas como grasa animal, huevos, miel o leche.
Los distintos pigmentos obtenidos fueron aplicados sobre una placa caliza usando una pluma de ave a modo de pincel y, unos días después, solo los pigmentos elaborados con sustancias aglutinantes grasas permanecieron fijados al soporte rocoso.
De esta forma, al comparar las muestras prehistóricas y las experimentales se confirmó que la molturación intensa del carbón vegetal y su mezcla de aglutinantes grasos constituyeron las etapas de elaboración de los pigmentos de Les Dogues.
Los resultados de este trabajo cuestionan la simplicidad técnica tradicionalmente asociada a los pigmentos levantinos y la presencia de carbón vegetal en ellos abre la posibilidad de obtener la primera datación absoluta del arte levantino, cuyo marco crono-cultural es objeto de un intenso y largo debate.
nrv