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La Procuraduría General de la República (PGR) abrió una investigación por el caso de la comercialización de falsificaciones de esculturas de autores como Jorge Marín en el Nacional Monte de Piedad (NMP), informó el titular de la Unidad Especializada en Investigación de Delitos contra los Derechos de Autor y la Propiedad Industrial, Arturo Ancona García-López, quien también anunció la destrucción la próxima semana de 93 bronces decomisados en un operativo en septiembre pasado, y del fundido que resulte, un grupo de artistas —entre ellos Marín— esculpirán una obra “contra la piratería”.
“El caso del Nacional Monte de Piedad no nos había sido denunciado por el autor Jorge Marín, y por tanto no estaba sujeto a investigación, pero en el momento que tuvimos conocimiento de que el Monte de Piedad tenía esas piezas —por la nota que publicó EL UNIVERSAL—, iniciamos una investigación, y está en curso”, dijo el fiscal antipiratería entrevistado en el foro “Derechos de Autor en la Creación Artística”, celebrado en la Escuela Libre de Derecho y convocado por el mismo escultor figurativo michoacano.
Agregó que hasta ahora, el NMP no ha entregado a la PGR las falsificaciones. “Estamos en eso”, dijo.
El pasado 12 de febrero, EL UNIVERSAL publicó que el Monte de Piedad comercializaba en su sucursal de Victoria y Revillagigedo, al menos una veintena de falsificaciones de esculturas atribuidas a Marín, quien desde hace una década combate los plagios a sus obras. Los bronces llegaron a la institución de asistencia privada vía el empeño y al no ser recuperados por los pignorantes, fueron enviados a la almoneda por un precio de venta de 36 mil pesos (25 mil 200 con descuento), cuando por las piezas se prestaron 18 mil pesos cada una.
Consultado al respecto, Marín identificó cada una de las esculturas como falsificaciones de obras suyas y lamentó que la piratería se haya institucionalizado en la sociedad al comercializarse en lugares como el Monte de Piedad, cuyos voceros negaron que se cometieran ilícitos en esas operaciones con el argumento de que no se vendían obras de arte, sino bronce por kilo.
El fiscal de la unidad antipiratería Ancona García-López dijo que la investigación en torno al caso del Monte de Piedad está enfocada por ahora a determinar si hubo dolo en la institución filantrópica en la comercialización de falsificaciones de Marín y otros artistas y si se comprueba esto, se ejercerá acción penal, de lo contrario, agregó, se investigará quién o quienes llevaron a empeñar las esculturas.
El funcionario, además, anunció que el próximo jueves 14 de abril, en una instalación que tiene la PGR en calzada Vallejo 3000, frente a artistas y medios, se destruirán 93 esculturas decomisadas el 30 de septiembre pasado en dos bodegas, la mayoría de las cuales eran falsificaciones atribuidas a Jorge Marín y a su hermano Javier, aunque había otras con el nombre de Toledo, Carrington y Botero.
Al respecto, Jorge Marín confirmó que un grupo de artistas y él están en pláticas con la PGR para que con el bronce que resulte de la fundación de las esculturas apócrifas se haga una escultura anónima que se instale en una institución cultural, una escuela o un espacio público, que recuerde la lucha emprendida para combatir la piratería de sus creaciones.
“El proyecto es que con todo el material que resulte de la destrucción de estas obras, que son de varios artistas, se pueda construir una obra un tanto anónima que celebre que se está trabajando por los derechos de autor. Estamos buscando ahora mismo la posibilidad de instalarla en alguna institución de cultura, o en la vía pública misma, que nos recuerde a todos que es un tema que está abierto y que nos concierte a todos”, expuso el artista, quien adelantó que la destrucción de esas obras decomisadas en Santa Marta Acatitla e Ixtapaluca fue gracias a una denuncia que interpuso él.
Además aseguró estar contento con cómo se está resolviendo el caso del Monte de Piedad.
“Es un logro llegar hasta las últimas consecuencias. El caso del Monte de Piedad está teniendo un final feliz, se destapó todo un asunto irregular y oscuro que había al interior. Ya se llegó a un compromiso muy puntual con ellos (NMP) para que retiren las obras falsas y para que verifiquen cualquier obra de arte contemporáneo que reciban. Además, está la investigación de la PGR en torno al caso”, dijo Marín.
Lanzan propuestas. Durante su participación en ese foro, Adriana López González, coordinadora del encuentro, habló de una serie de medidas que los escultores y artistas deben tomar en cuenta para evitar que sus obras sean objeto de falsificación y que, en caso de darse, poder tener las herramientas para seguir un proceso penal. También propuso la creación de un Código de Ética de la Fundición, como ocurre en otro países, en donde los firmantes se obliguen a acatarlo.
“Es preciso que (los artistas) cuenten con documentos que sirvan como evidencia de su proceso creativo y de lo acordado con terceros en relación con las obras que les habrían sido confiadas y no solamente seguir basando sus relaciones de trabajo en premisas de buena fe”, dijo. Lo más importante, señaló, es que los artistas tengan un inventario detallado de su obra, que tengan registro del taller donde se realizó su fundición, el número de piezas que se hicieron, a quién vende o dona su obra; si otorgó los derechos de reproducción de su obra y con qué límites.
Por su parte, Luis Wertman, presidente del Consejo Ciudadano de la Ciudad de México, anunció que se pondrá a disposición una línea de denuncia para reportar obras falsas: 55335533, disponible las 24 horas todos los días.
