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Un joven estudiante de enfermería de la Lincoln Memorial University de Tennessee llamado Jonny Wade quiso comprobar cómo sería experimentar los dolores de un parto, así que se conectó a una máquina que, mediante descargas eléctricas en el abdomen, simulaba la cantidad de dolor que sufren las mujeres al dar a luz.
El resultado ya lo puedes imaginar. Cuando Jonny comienza a sentir el dolor, al principio parece soportarlo de cierta manera, pero rápidamente este se hace insoportable para él y pide a gritos que paren el "experimento". El tiempo que el joven estuvo conectado a la máquina no fue superior a los 20 segundos. Así es. Mientras que las mujeres pueden aguantar horas, este joven no pudo ni medio minuto.
En declaraciones al Daily Mail, Wade aseguró que se había hecho daño muchas veces practicando deportes extremos, pero que nunca había sentido tanto dolor como en esa ocasión. “No creo que la simulación fuera tan severa como la realidad porque el dolor es superficial. Supongo que en la realidad el dolor es más profundo y más visceral”, dijo el joven.
jpe
