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Muchas novedades relacionadas con la salud de la población hispana en América podrían presentarse bajo la fórmula del ¿Sabía que…?, utilizada como recurso para desvelar aspectos curiosos o poco conocidos de un determinado asunto o situación.
Y las respuestas a esta pregunta, a menudo, suelen ser sorprendentes y positivas, como muestran investigaciones recientes sobre los hispanohablantes:
*Envejecen lentamente
Un estudio de la Universidad de California (Ucla) muestra que los latinos envejecen a un ritmo más lento que otros grupos étnicos.
En Estados Unidos, los latinos viven más tiempo que los caucásicos, a pesar de experimentar mayores tasas de diabetes y otras enfermedades, y los científicos se refieren a esto como la “paradoja hispana”, según el autor del estudio, el profesor de genética humana Steve Horvath.
“Nuestro estudio demuestra que los latinos envejecen más lentamente a nivel molecular”, señala. Horvath y su equipo analizaron muestras del ADN sanguíneo de 6 mil personas de siete etnias diferentes y hallaron que la sangre de los latinos y un pueblo indígena de Bolivia, llamado tsimane y relacionado con los latinos, envejece más lentamente.
A la misma edad, su sangre es dos años más joven a nivel molecular que la de los latinos y cuatro años más joven que la de los caucásicos. Lo anterior se refleja en que este grupo tenga un mínimo de enfermedades del corazón, diabetes, hipertensión, obesidad o arterias obstruidas, según los investigadores.
*Baile cardiosaludable
Un programa de baile de cuatro meses ayudó a un grupo de adultos latinos mayores a caminar más rápido y mejoró su estado físico, lo que podría reducir su riesgo de sufrir una enfermedad cardiaca, según una investigación presentada ante la Asociación Americana del Corazón (AHA) de Estados Unidos.
Investigadores de la Universidad de Illinois, en Chicago, quisieron comprobar si el baile latino podría beneficiar a un grupo de 54 adultos de habla hispana que no eran muy activos físicamente y tenían alrededor de 65 años de edad. Un 80% de ellos eran mujeres mexicanas.
Una parte de los participantes bailó algunos de los ritmos latinos, como merengue, bachata, chachachá y salsa, dos veces por semana, dirigidos por el instructor de baile y con coreografías más complejas a medida que avanzaba el programa, mientras que otra parte de los voluntarios solo asistió a un programa de educación para la salud.
Tras cuatro meses de practicar estos bailes, las personas caminaban más rápido y eran más activas físicamente durante su tiempo libre que antes de comenzar a bailar, según la AHA.
“Quienes asistieron a las clases de baile veían reducido su estrés, interactuaban entre sí y formaban una comunidad, por lo que este programa de la UIC, llamado Bailamos, impactó en su salud emocional y bienestar”, según Priscilla Vásquez, máster en Salud Pública, quien lideró el estudio.
*Contra cáncer de mama
Una investigación liderada por expertos de la Universidad de California San Francisco (UCSF) identificó una variante genética común en las mujeres latinas que las protege contra el cáncer de mama.
Esta variante –una diferencia en uno de los tres mil millones de ‘letras’ del genoma humano– es originaria de los indígenas americanos y confiere una protección significativa contra el cáncer de mama, especialmente, contra uno de sus tipos más agresivos y con peor pronóstico.
“Si una mujer tiene una copia de esta variante, como cerca del 20% de las latinas de los Estados Unidos, tiene un 40% menos de probabilidades de padecer cáncer de mama. Si tiene dos copias, como el uno por ciento de la población latina estadounidense, la reducción es de un 80 por ciento”, dice el profesor de Medicina Elad Ziv, autor del estudio.
Hay más opiniones al respecto. “La biología básica aún no puede resolver la asociación entre esta variante genética encontrada en el cromosoma 6q25 y la reducción del cáncer de mama”, dice por su parte Jean René Clemenceau Valdivia, oncólogo del hospital Ángeles Pedregal de la Ciudad de México.
*Educando con novelas
Audionovelas contra la diabetes: El Centro Joslin, en Boston (EU), afiliado a la Universidad de Harvard, utiliza audionovelas en español dirigidas a la comunidad hispana para que conozcan y prevengan mejor la diabetes tipo II, ya que este grupo es propenso a desarrollarla. El programa es impulsado por el endocrinólogo mexicano Enrique Caballero y busca educar al paciente y a la familia para que mantengan una mejor alimentación, hagan ejercicio, controlen su presión arterial y nivel colesterol, y prevengan complicaciones.
Por ejemplo, “una de las piezas cuenta la historia de una mujer con diagnóstico de diabetes y aporta información sobre nutrición, ejercicio, medicamentos, monitoreo de la glucosa en la casa y prevención de los efectos emocionales de la dolencia”, explica el médico.
jpe