Más Información
Guadalupe Taddei solicitará ampliación del presupuesto para la elección judicial a la Cámara de Diputados; “si funciona, estaremos mejor en calidad y resultados"
Sheinbaum es una "consumidora voraz" de información: José Merino; el tablero de seguridad, herramienta clave, destaca
IMSS-Bienestar asegura mantener contratados a 2 mil trabajadores en entidades no adheridas al organismo
Rosa Icela Rodríguez se reúne con próximo titular del INM; “arrancaremos el 2025 con mucho trabajo”, asegura
SSa llama a tomar medidas preventivas ante bajas temperaturas; pide proteger salud por temporada invernal
Un equipo de investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Coimbra (FMUC) está desarrollando un páncreas bioartificial para tratar la diabetes mediante una microcápsula con células productoras de insulina.
Este proyecto, que pretende suplir las células productoras de insulina que son destruidas en la diabetes tipo 1, está siendo conducido por un equipo de investigación encabezado por la portuguesa Raquel Seiça, según informó hoy el centro en un comunicado.
El equipo asegura que este avance "permitirá a los pacientes con diabetes tipo 1 librarse las inyecciones de insulina y lograr un mejor control de los niveles de glucosa, disminuyendo las complicaciones de la enfermedad y mejorando su calidad de vida".
Los resultados de los experimentos llevados a cabo primero in vitro y posteriormente in vivo -como se denomina a las pruebas que se hacen directamente dentro del organismo vivo- mediante el trasplante de las microcápsulas a ratones diabéticos fueron "muy prometedores".
"Se observó in vitro un aumento de la viabilidad celular y de la producción de insulina y en los animales diabéticos una mejora de los niveles de glucosa en sangre y de resistencia a la insulina", añadió la coordinadora.
Los avances en estas investigaciones científicas cuentan con gran importancia en Portugal debido a la creciente incidencia de la diabetes en el país, una enfermedad crónica que en estos momentos afecta ya a más de un millón de ciudadanos lusos.
A pesar de haber logrado grandes progresos, Seiça cree que "todavía hay un largo camino por recorrer, es necesario reducir el tamaño de las microcápsulas, que sean aún más estables, más viables y más funcionales para poder ser trasplantadas a los seres humanos".
jpe