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Científicos de la Universidad británica de East Anglia describen en un estudio publicado este lunes en la revista Nature el funcionamiento de una membrana celular que sirve a algunas bacterias para defenderse de los antibióticos.
El trabajo allana el camino para una nueva hornada de fármacos que pueden ayudar a retirar esa barrera defensiva y combatir a las bacterias resistentes, según explicó la Universidad en un comunicado.
"La resistencia a los antibióticos es un reto sanitario global. Muchos de los antibióticos corrientes se están volviendo ineficaces, lo que provoca miles de muertes cada año. El número de 'supermicrobios' está aumentando a una velocidad inusitada", afirmó Changjiang Dong, autor principal del estudio.
Los investigadores han utilizado la instalación nacional británica de radiación sincrotrón, la Diamond Light Source, para analizar a nivel atómico organismos denominados bacterias gramnegativas.
Esa clase de bacterias son particularmente resistentes a los antibióticos debido a su membrana celular externa impermeable a los lípidos.
Esa barrera impide actuar tanto al sistema inmunológico del cuerpo humano como a los fármacos antibióticos y permite al patógeno sobrevivir a los tratamientos convencionales.
Los científicos han detectado una estructura de proteínas que sirve de "puerta" para que la célula pueda importar nutrientes y secretar moléculas biológicas.
Al impedir el funcionamiento normal de esa estructura de proteínas, que Dong y su grupo describen en el trabajo publicado en Nature, la bacteria no puede sobrevivir.
Los investigadores de la Universidad de East Anglia subrayan que la comprensión de ese mecanismo servirá asimismo para describir con mayor exactitud algunas disfunciones en células humanas relacionadas con desórdenes como la diabetes, el parkinson y otras enfermedades neurodegenerativas.
kal