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miguel.pallares@eluniversal.com.mx
PepsiCo está interesada en llegar a Cuba cuando existan las condiciones comerciales para vender sus productos en la isla y consideró que México puede tener ventajas en estos cambios por ser afín a la nación, además de ser fuente de exportaciones hacia el Caribe y Centroamérica.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Pedro Padierna, presidente de PepsiCo México, reconoció la posibilidad de tener un nuevo complejo industrial en México, ante el aumento en el uso de su capacidad instalada y al tener una inversión comprometida por 5 mil millones de dólares de 2011 a 2019.
Destacó la importancia de México como una de las principales subsidiarias para la firma y su objetivo es consolidar al país como la operación más importante fuera de Estados Unidos.
En cuanto a los niveles de consumo, Padierna dijo que la recuperación ha sido gradual y ahora comienzan a llegar a los niveles previos al IEPS.
Tras dos años de tener un IEPS, ¿cómo está PepsiCo en México?
—Todavía no nos terminamos de adaptar, los impuestos sí afectaron el consumo, pero éste se ha ido recuperando gradualmente. Estamos llegando a los niveles previos al impuesto.
Ha sido un proceso por el cual hemos ido transformando nuestras fórmulas, quitándole algunos negativos. Aumentamos elementos positivos y sustituyendo condimentos, por ejemplo, con queso real en Cheetos.
En tema de inversiones, ¿qué tamaño tiene PepsiCo?
—Contratamos alrededor de 40 mil personas en México, tenemos más de 250 centros de distribución. En materias primas compramos 20% de las papas del país. Somos empresa agroindustrial, con un enorme impacto en el campo. Hicimos un anuncio, vamos a la mitad de una inversión de 5 mil millones de dólares en México, en innovación, temas agrícolas, nuevas líneas de producción. Hemos seguido el programa en tiempo, diríamos que invertimos mil millones de dólares al año.
Una de las plantas de Vallejo ha recibido inversiones importantes para hacerla una de las más modernas de PepsiCo en el mundo. La planta de Gamesa Valle de México va a recibir nuevas líneas, enfrente hay otra planta y se están trayendo productos nuevos.
¿Hacia dónde quiere llevar la compañía entre cinco a 10 años?
—Mi responsabilidad es el crecimiento sostenible y sostenido, es decir, llevar un ritmo de crecimiento que cada año sea estable y para lograrlo se necesitan traer productos innovadores.
Otro tema es la sostenibilidad de los recursos naturales. Uno de los programas de inversión es para la reutilización del agua a través de tecnología y también estamos trayendo energía eólica alrededor de 30%, el reto para mi equipo es elevarlo, en poco tiempo haremos un anuncio porque sabemos cómo incrementarlo sustancialmente. En talento, 40% de nuestros empleados son millennials, piensan, quieren y se comportan diferente, de 10 a 15 años llevarán la empresa. Una de las características de este grupo es que le gusta el cambio, pero para ser efectivo deben quedarse en un lugar, entonces lo que estamos acelerando son los programas de transferencia a otras subsidiarias.
Otro es la diversidad, un tema de negocio y de dignidad humana, queremos que los colaboradores vengan como son y se expresen libremente.
En participación, ¿qué nivel tiene México para PepsiCo?
—Dependiendo del tipo de cambio es la primera y la segunda subsidiaria fuera de Estados Unidos. Compite con Rusia, porque ahí compramos una empresa de leche muy grande, pero también el rublo se devaluó.
¿Qué prevé de esta participación en la compañía en cinco años?
—Tenemos que seguir siendo la subsidiaria más importante de PepsiCo fuera de Estados Unidos. Es nuestra aspiración colectiva, nuestra visión, más que por competencia es para lograr un crecimiento acelerado y sostenido.
México está aportando la mayor parte del crecimiento de la región y esto a otras compañías no les pasa desapercibido, hay que ver la cantidad de empresas que llegan al país.
Para PepsiCo seguir invirtiendo en México es estratégico, porque estamos convencidos que hay un crecimiento moderado por muchos años.
¿Ve posible abrir nuevas plantas?
—Dentro de los planes de inversión de los 5 mil millones de dólares hay recursos en nueva capacidad, de hecho lo que estamos haciendo es consolidando algunas plantas para utilizar mejor nuestro espacio, pero estamos llegando a un punto que las plantas están siendo utilizadas al máximo.
Ahora con la nueva tecnología y automatización, en los mismos espacios tenemos líneas más productivas. La planta de Vallejo será una de los complejos más productivos y más grandes del sistema a escala mundial.
¿Dónde están los retos? ¿En un aumento en el IEPS o la inseguridad en puntos del país como Oaxaca?
—Son retos, nos sentimos tristes con lo que pasa en algunas partes del país. Tengo que manejar un balance, lo primero es la seguridad de la gente y la atención al consumidor.
Hemos venido superando con inversiones y tecnología la inseguridad.
Uno de los temas en el futuro será cómo proyectemos la confianza para la inversión en el país.
De Cuba, ¿México puede aprovechar este mercado para PepsiCo?
—Es uno de los mercados afines a nosotros, nuestras marcas luego aparecen ahí, no sabemos por qué, pero esperamos que las conozcan. Por limitaciones legales no lo podemos hacer directamente, pero algún emprendedor se le ocurrió que hacía sentido, pero en el momento que tengamos libertad de comercio, lo buscaremos.
De hecho México es una fuente de exportaciones para el Caribe y Centroamérica, todas las galletas dentro de la marca Gamesa y las submarcas Emperador, Marías, todas las que se venden en Centroamérica y el Caribe son producidas en México.