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Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) está preparada para enfrentar la apertura en la venta de turbosina que se registrará este año en el mercado nacional, aseguró el director del organismo, Alfonso Sarabia de la Garza.
El funcionario detalló que el costo del combustible representa entre 28% y 30% del valor de un vuelo, por ello la importancia de este mercado.
Con más competidores, dijo, “vamos a luchar por dar el mejor servicio y el mejor precio; tenemos la experiencia de 50 años para competir con cualquier empresa extranjera”.
Hasta ahora, de acuerdo con la Comisión Reguladora de Energía (CRE), de los 65 permisos otorgados por la autoridad regulatoria para el expendio de turbosina en terminales aéreas del país, 61 fueron otorgadas a ASA.
Los otros cuatro permisos se entregaron a: Servicios Estatales Aeroportuarios, que se encargará del suministro a las naves que lleguen al Aeropuerto Internacional Plan de Guadalupe, ubicado en Saltillo, Coahuila.
Otro se entregó a Servicios Estatales Aeroportuarios para surtir en la terminal de Piedras Negras, Coahuila.
El tercer permiso lo recibió Altos Hornos de México, desde el 2 de junio del 2016, con el que atenderá el servicio en un aeropuerto ubicado en la Carretera Federal 30, kilómetro 7, que es una carretera que recorre los estados de Durango y Coahuila, en una longitud total de 470 kilómetros.
El cuarto permiso lo tiene Sociedad Cooperativa de Consumo de Servicios Aéreos de la Terminal Privada Aeropuerto del Norte, localizado en Apodaca, Nuevo León.
Desde el 31 de marzo de 2016, según publicó EL UNIVERSAL, esta relación de permisos no ha cambiado, lo que significa que hasta ahora hay poco interés de los privados por participar en la comercialización de petrolíferos.
Durante la comparecencia del director de ASA con la Comisión Especial de la Cámara de Diputados encargada de estudiar, analizar, evaluar y supervisar el funcionamiento de aduanas, puertos y aeropuertos nacionales, la administradora opera los 61 permisos que le fueron otorgados a partir del 17 de diciembre del 2015.
Con estos permisos, la empresa cubre las necesidades de combustibles aéreos de todo el Sistema Aeroportuario Nacional, estimadas en poco más de 4 millones de litros anuales.
De ellos, 1.1 millones son distribuidos en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México; 71 mil litros los absorbe la propia dependencia; 734 mil litros el Grupo Aeroportuario Asur; 670 mil litros el grupo GAP, y OMA capta otros 346 mil litros; en tanto que los aeropuertos operados en sociedad y otros consumen el resto.
Hasta septiembre de 2016, último dato disponible, los principales clientes de ASA son: Aeroméxico, que le compra 497 mil litros; Volaris, con 476 mil litros; Interjet, con 362; Aeroméxico Connect, con 290; Vivaaerobus, con 158; United Airlines, con 135; American Airlines, con 118; Delta Airlines, con 101; Iberia, con 57, y Lufthansa con 56 mil litros anuales.
