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maria.saldana@eluniversal.com.mx
México debe trabajar en una “estrategia emergente” que incluya acciones para apuntalar el crecimiento en el mercado interno, ante la coyuntura económica interna y externa de desaceleración que enfrenta el país, aseveró el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón.
Deben implementarse tres principios fundamentales con efectos inmediatos: apuntalar la estabilidad macroeconómica; fortalecer la confianza y tener un entorno favorable para la inversión, la creación de empleos, la productividad, y con ello lograr un incremento sostenido de los ingresos de las familias que a su vez se refleje en el consumo.
En su mensaje semanal La Voz del CCE, expuso que por la inseguridad pública y el deficiente Estado de derecho hay inversión y consumo “retenido”, el cual no se materializará hasta que no se tenga un efectivo sistema nacional contra la corrupción.
Actualmente en dos de los tres principales motores de crecimiento económico del país hay un margen de maniobra “acotado en el corto plazo”, lo que ocurre en el sector externo y en el gobierno, mientras que el mercado interno no deja de crecer.
Para compensar el débil crecimiento externo, la inestabilidad que pudiera derivar en nuevos episodios de depreciación, la volatilidad cambiaria y movimientos abruptos de capital, debieran tomarse acciones que apuntalen el mercado interno, destacó.
A ello se suma el hecho de que en el gobierno federal se alistan fuertes recortes al gasto y hay poco margen de acción con las políticas fiscal y monetaria.
“Ante este escenario, estamos en un buen momento, al comenzar el segundo trimestre del año, de armar una estrategia emergente, con principios muy concretos y un paquete de medidas puntuales para impulsar el crecimiento en el corto plazo, con énfasis en el mercado interno”, subrayó Castañón.
Además, aseveró que los principios fundamentales que se requieren son “mantener estabilidad macroeconómica; fortalecer la confianza en las instituciones, de que las cosas se pueden hacer bien y correctamente; la confianza del consumidor, para la inversión y en el sistema y; agilizar proyectos de infraestructura estratégicas sobre todo aquellas vinculadas con las Zonas Económicas Especiales”, dijo.
El representante del sector privado añadió que para recuperar la confianza de los inversionistas es necesario establecer un mecanismo de solución permanente para el pago de estados y municipios a sus proveedores, además de continuar con la mejora regulatoria para que se agilice el movimiento y gestión de las empresas.
Hace falta también acelerar la implementación de políticas de mejora regulatoria, además de dar profundidad a las oportunidades que hay en la ley de asociaciones público-privadas de manera que haya certidumbre e incentivos a la inversión de las empresas.
Castañón dijo que en estos momentos debe haber una estrategia proactiva en la que en lugar de preocuparse del bajo crecimiento y del entorno externo, hay que “ocuparse” en plantear opciones que traduzcan en crecimiento.