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El menor dinamismo de las ventas internas en el país al inicio de este año trajo como consecuencia un mayor recorte de personal en el sector comercio, de manera que en el primer trimestre se perdieron 20 mil 318 empleos, de acuerdo con los datos más recientes del número de trabajadores adscritos al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
La eliminación de puestos formales en el comercio es un fenómeno estacional, pero entre enero y marzo la pérdida fue 48.9% superior a la registrada hace un año, lo que llama la atención considerando que la actividad representa una quinta parte del total de trabajadores registrados en el Seguro Social.
Si bien el año pasado el dinamismo del mercado interno fue uno de los principales motores de la economía nacional, al inicio de este año su crecimiento tiende a disminuir.
Por ejemplo, las ventas de las cadenas comerciales para mismas tiendas pasaron de un crecimiento anual de 8.1% al cierre del año pasado a 5.8% en marzo pasado, de acuerdo con datos de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD).
Otro factor que ha incidido en el menor dinamismo del sector comercio ha sido la disminución de la confianza del consumidor, que al cierre del primer trimestre de este año se ubicó en su nivel más bajo desde agosto de 2014.
El comportamiento del mercado laboral en México al inicio del año ha sido desigual. Mientras que en el comercio se perdieron empleos, en el sector servicios se generaron 100 mil 189 nuevas plazas en el primer trimestre, lo que significó un incremento anual de 26.6%.
Del total de plazas creadas, 59% correspondió a servicios sociales y comunales, y el resto a servicios para empresas, personas y hogar.
Uno de los sectores más dinámicos en la economía es el de los servicios, lo que ha favorecido la generación de nuevos empleos.
Por ejemplo, en las actividades relacionadas con transportes y comunicaciones se crearon 14 mil 432 plazas de enero a marzo de este año, cifra 22.7% superior a la reportada en el mismo plazo de un año antes.
Este no fue el caso para las industrias manufactureras y de la construcción, cuya actividad productiva se ha venido desacelerando, lo que también está impactando en su capacidad para generar nuevos empleos. Por ejemplo, hasta marzo pasado se habían creado 88 mil 445 nuevos puestos en la industria de la transformación, cifra 34% inferior a los del primer trimestre de 2015.
En la industria de la construcción la generación de empleos se redujo 23.5% a tasa anual, para acumular 45 mil 733 nuevos empleos en los primeros tres meses del presente año.
Cabe destacar que la manufactura y la construcción son actividades altamente empleadoras, pues más de una tercera parte de los trabajadores registrados en el IMSS se encuentran en cualquiera de esos dos sectores.
Los analistas del sector privado estiman que este año se podrían generar 651 mil empleos formales, con un crecimiento económico de 2.4%; sin embargo, las expectativas tienden a ser menores ante una situación nacional e internacional más difícil.
