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La asignación de tres de los cinco campos petroleros que licitó el gobierno federal mexicano es un resultado positivo aunque no se deben descuidar aspectos como el monto de las inversiones, aseguraron representantes del sector privado.
El director general del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), Juan Pardinas, dijo que además de asignar los bloques es importante considerar el monto de las inversiones que se compromete a hacer la empresa o el consorcio ganador, porque entre más inviertan los privados más grandes serán las ganancias que tendrá el Estado mexicano.
Son dos las variables a considerar, por una parte ver cuánto va a recibir el gobierno por los pozos y por otra parte cuántos recursos se invertirán por parte de los privados para desarrollar las obras, ya que si una empresa "pone poco, el pastel es poco", comentó Pardinas.
En el marco del 22 Congreso de Comercio Exterior Mexicano que organiza el Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Manuel Herrera, explicó que esta segunda fase de la Ronda Uno "fue mejor, avanza y va por buen camino la implementación de la reforma", a pesar de que se habían puesto expectativas muy altas y no se ha logrado alcanzar esos niveles.
Comentó que si bien se tuvieron que hacer ajustes a los contratos después de la respuesta vista en la primera licitación de la Ronda Uno y se tendrá que seguir trabajando para tener resultados positivos, es claro que los bloques de explotación son más atractivos para las empresas.
Pardinas expuso que el cambio en los contratos obedeció a que la propuesta gubernamental inicial no respondía a las necesidades del mercado, lo que se vio con la baja participación de la primera licitación de la Ronda Uno.
El director del IMCO aseveró que a la fecha se observa una despetrolización de la economía mexicana, ya que en tan solo dos años el porcentaje de recursos públicos provenientes del petróleo bajó de 35 centavos por cada peso a 16 centavos.
jlcg
