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Siempre es un placer escuchar Symphony of destruction de Megadeth en un buen equipo de audio dentro de un auto. Subirle a todo lo que da y sentirse un rockstar a lado de Dave Mustaine en el escenario cantando a todo pulmón. No se ve nada mal y menos si es un auto deportivo o ya en un hatch, sedán o hasta en un SUV compacto, pero se ve rarísimo cuando vas en un familiar mediano mientras tú, al volante, disfrutas de la guitarra de Kiko Loureiro y en las pantallas traseras (montadas en las cabeceras de los asientos del piloto y copiloto) se reproduce; en la derecha la película de Disney Pixar “Grandes Héroes” y en la izquierda, el álbum Spectre de Alan Walker.
Por muy extraña la escena, eso fue lo que permite experimentar uno de los vehículos familiares por excelencia en el segmento SUV mediano, el Nissan Pathfinder, un modelo que más allá de un simple rediseño, evolucionó en favor de una experiencia totalmente placentera para todos los ocupantes gracias a la independencia que les permite el espacio y equipamiento, principalmente el de entretenimiento. Esto sin dejar de lado la mejora en la tecnología de seguridad y la calidad de los materiales para hacer de los viajes más amenos.
Sin duda, es un vehículo que contempla el término “familiar” de una mejor manera a diferencia de sus rivales Toyota Highlander, Honda Pilot, Chevrolet Traverse, Volkswagen Touareg, Ford Explorer y Mazda CX9.
Sí bien, por fuera —a nuestro parecer— no es la más agraciada entre sus competidores —para eso está la Mazda CX9— luce una imagen más moderna gracias a la parrilla V-Motion, la nueva defensa, faros en forma de boomerang, luces de niebla, espejos laterales con luces direccionales y abatibles eléctricamente, entre otros elementos. Además de los rines de aluminio de 20 pulgadas que le aleja del estilo familiar y le confieren un aire aventurero que se refuerza con los rieles de techo que le dan flexibilidad para colocar accesorios o el equipaje.
Como una sala de estar. Por dentro, es la maravilla. Es cierto que no tiene el espacio y comodidad de una minivan pero vaya que se le acerca bastante. Es un SUV para que siete pasajeros viajen cómodamente y hasta todavía tiene espacio en la zona trasera para meter unas dos o tres maletas medianas, algo de lo que carecen otros modelos de este tipo.
La parte del equipamiento es lo que le da el distintivo a este Pathfinder. De entrada, cuenta el Nissan Connect con pantalla a color de ocho pulgadas, donde se operan y monitorean prácticamente todas los sistemas de este SUV, incluyendo la navegación. Esto se complementa con el equipo de audio Bose de 12 bocinas donde se escucha muy bien The Trooper de Iron Maiden sin afectar la película o el playlist que se reproducen simultáneamente en el sistema de entretenimiento compuesto por dos pantallas independientes de ocho pulgadas con entradas auxiliares, control remoto y audífonos inalámbricos de alta fidelidad.
El manejo. El empuje del motor 3.5 litros y el control que ofrece la dirección y la tracción 2WD con modalidad i-4WD, es más que suficiente para domar el peso del vehículo, pero eso no es lo que le diferencia del modelo anterior, sino más bien la tecnología y asistencias a la conducción, pues esta versión actualizada incluye el Nissan Safety Shild, el cual cuenta con control crucero inteligente que mantiene la velocidad y distancia con el vehículo de enfrente, el detector de objetos en movimiento, el Around View Monitor que alerta de todo lo que se mueva alrededor del auto, la alerta de punto ciego y de tráfico cruzado, entre otros.
Pathfinder 2018 es un SUV versátil, muy equipado y con buen rendimiento de combustible (10km/l) que lo hacen recomendable para el uso diario, familiar y recreativo.
