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Las primeras actuaciones de Morena en el Congreso generan decepción. Las preguntas se multiplican sin que tengamos las respuestas. Si el nuevo partido dominante del sistema político, Morena, actúa como lo hacía el viejo partido dominante se puede pensar que así es la política, con arreglos bajo la mesa y decisiones turbias que violentan la legalidad. Eso fue lo que pasó con la licencia a Manuel Velasco para regresar a Chiapas de gobernador y el extraño regalo de diputados del Verde a Morena.
¿Así es la política? No hay que darle muchas vueltas porque llegaremos al mismo lugar. Esta lógica implica resignarse o, al menos, aceptar que gobierne quien gobierne, se tendrán resultados similares. Se puede justificar que así pasa en todos los países independientemente de su nivel de desarrollo y de la calidad de la democracia. Si así son las cosas, podemos comprender de mejor forma por qué la ciudadanía en nuestro país se caracteriza por el enorme desencanto de la política. La razón es que la vida pública y las democracias estás llenas de falsas promesas (Bobbio dixit) porque, entre otras cosas, no se cumplen las ofertas de las campañas electorales y los compromisos. Una conclusión es que el tiempo de los gobiernos está lleno de arreglos en donde se puede violar la legalidad y pasar por encima de la cualquier referencia ética.
¿Cuánto valen los compromisos y las ofertas de AMLO y de Morena de que nadie está por encima de la ley y nada al margen de la legalidad? Ricardo Raphael lo argumentó en este diario, en el caso de Manuel Velasco se violaron dos artículos de la Constitución, 116 y 125, porque no se pueden tener dos cargos de elección popular, ni se puede regresar a una gubernatura bajo ninguna figura. La licencia solicitada no se trata de un derecho, sino de una obligación. En este caso se vendió gato por liebre y se rompió la norma, Morena hizo una maniobra para votar dos veces en el Senado y procesar una licencia-permiso para poner a un gobernador-senador por encima de la ley.
¿El voto del 1º de julio alcanza para cubrir maniobras como las que vimos el pasado 5 de septiembre sin perder legitimidad? Un triunfo electoral tan contundente significó un mandato de cambio. La recomposición del sistema de partidos pasó de plural a otro dominante, porque la ciudadanía está cansada de una partidocracia que maniobra con las reglas y hace arreglos en lo oscurito. Si los partidos tienen un enorme desprestigio, como fenómeno general, en México el que se lleva el premio es el Partido Verde. Hace unos años un grupo de más de ciento cincuenta mil personas pedimos que se le quitara el registro a ese partido por su conducta de violentar de forma sistemática la legalidad. Desafortunadamente el INE renunció a su facultad de aplicar la ley y le dejó el registro a esa organización. Por eso, hoy resulta grave ver que el nuevo partido dominante establece una alianza con los verdes, al grado de hacer un cambalache de cinco diputados verdes a las filas morenistas. Si la alianza de Morena con el PES generó nutridas críticas, la que se hizo con el Verde huele a podrido.
¿Qué confianza se puede tener en esos operadores políticos que hicieron el cambalache entre Morena y el Verde y entre Monreal y Velasco? Los que violentan las reglas y los procedimientos son los operadores. La confianza se gana cuando la acción política se enmarca dentro de un comportamiento transparente y apegado a la legalidad. Lo que vimos en el senado fue la operación de una mayoría para justificar una decisión que violentó la legalidad y puso por delante un acuerdo pragmático, sin ninguna ética. Una vez que se transita por esa ruta, nada garantiza que se trate de una excepción y no de una regla que se vaya a repetir cada vez que sea necesario.
Después de la fiesta ¿ha llegado la hora del realismo y lo que se anuncia es más de lo mismo, pero con buenas intenciones? ¿El cambalache y la alianza de Morena con los verdes expresa la política de la nueva mayoría, es decir, más de lo mismo? Con mucho cinismo un diputado verde dijo que les salió “baratísimo” el cambalache, sin embargo, el desprestigio para Morena es muy costoso. Así es la política…
Investigador del CIESAS. @AzizNassif